¿Tenemos que aguantar esto? Las conductas que nos molestan en el metro

Mantener una conducta cívica y un comportamiento respetuoso cuando se vive en sociedad es fundamental, pero no todos somos conscientes de ello. Uno de los lugares en que más se observan estas actitudes es en el metro, ese gran gusano subterráneo que, especialmente en las horas puntas, alberga gente de (casi) todo tipo. Niños y viejos, más pobres y menos pobres, hombres y mujeres, todos confluyen en el metro.

El transporte, además, tiene una serie de características que hacen que haya que tener mucho cuidado con la actitud que mantenemos en él. El metro es subterráneo, carece de ventanas o ventilación y es un lugar cerrado del que no se puede salir.

Las conductas que nos molestan en el metro son innumerables: los pies sobre el asiento, gente que ocupa más de una plaza, personas poco aseadas, que hablan a gritos o que escuchan música sin cascos.

Una campaña necesaria

Tanto es así que el Metro de Madrid puso en marcha el 3 de julio de este año una campaña de uso responsable de las instalaciones a través de Twitter. #viajarenmetro fue el hashtag elegido por Metro de Madrid para señalar su campaña y, aunque muchos usuarios lo utilizaron para criticar a la empresa (cada vez menos) pública —la escasa frecuencia de los trenes, las escaleras rotas, las líneas cortadas, el aumento de precios...— el caso es que a través de la red Metro pudo lanzar algunas directrices que parece mentira que tengamos que recordar.

“Si vas sentado, mira a tu alrededor. Otras personas pueden necesitar el asiento” o “Por favor, no te apoyes en las barras asideras de los trenes, otros viajeros necesitan sujetarse en ellas” eran algunos de los consejos o peticiones que lanzaron a través de @metro_madrid.

“Hombres que ocupan demasiado espacio en el tren”

Este hartazgo para con el comportamiento de los demás no es exclusivo de España. De hecho, hay una de las actitudes que parece molestar más que las demás: el hecho de sentarse con las piernas abiertas o rodeado de mochilas, abrigos y demás bultos, ocupando así dos plazas en vez de una e inutilizando asientos libres.

La manía hacia la gente que se sienta así en el transporte público ha llegado a tal extremo que existe un sitio web llamado Men Taking Up Too Much Space On The Train, en el que se cuelgan fotos de personas en el metro ocupando más espacio del que les corresponde.

De la página se ha hablado mucho últimamente porque una de las fotos subidas mostraba a Richard Madden, actor famoso por su papel en Juego de Tronos, sentado con las piernas muy abiertas y, entre ellas, un paraguas y lo que parece ser un abrigo negro. El actor fue pillado en la línea Bakerloo del metro de Londres.

Pero aunque la foto del célebre Madden ha sido la más sonada, son decenas de hombres los que aparecen en la recopilación de fotos de personas irrespetuosas. Y, efectivamente, todas las que aparecen en Men Taking Up Too Much Space On The Train, y tal y como indica el nombre del sitio, pertenecen al género masculino. No queda claro si porque la creadora de la página tiene algo en su contra, o porque efectivamente son sólo los hombres los que abren las piernas, las expanden en otros asientos o los ocupan para dejar la mochila.