La absurda e incomprensible división del madridismo

El Real Madrid vive momentos convulsos. La tranquilidad y la normalidad en las relaciones que llegaron de la mano de la conquista de la Liga y Supercopa apenas duraron unos días. Las derrotas ligueras, la distancia con Barcelona y Atlético, las dudas en Champions y Copa además de los repetidos conflictos han llevado al madridismo a dividirse por encima del escudo y el propio nombre del club.

La arrolladora personalidad del entrenador ha llevado a los seguidores a estar a favor o en contra de Mourinho y han pasado a defender los intereses del club en función de las decisiones del técnico. Esa es la realidad que protagoniza el Real Madrid actual. 'Pros' y 'antis'. No hay más. Cualquier debate se vertebra alrededor de esa dicotomía y el perjudicado no es otro que el propio club. El mejor ejemplo ha tenido lugar con la suplencia de Casillas al que, de repente y de manera injusta, le han aparecido enemigos: aquellos que justifican la decisión del portugués.

Fabio Capello, conocedor de la casa en épocas anteriores ha dado con la clave y ha recordado a unos y otros la realidad que parecen haber olvidado. "El Real Madrid está por encima de todos. Cuando uno entrena este equipo, debe saber que antes y después de él está y estará el Real Madrid y el madridismo. Por encima de todos está el nombre del Real Madrid", comentó al diario As.

El italiano habla con conocimiento de causa, el de un entrenador que hizo campeón en dos ocasiones al equipo blanco, aguantando circunstancias en contra y en una de ellas con todo en contra. Calló, trabajó y se marchó anteponiendo el club a sus intereses y no enfrentando a unos y otros. Todos deben tomar nota de lo dicho por Capello.

Ahora club, plantilla y técnico deben reflexionar y elegir la mejor opción para el Real Madrid. El Bernabéu hablará en los próximos días y dictará sentencia pero la división actual sólo puede llevar a la entidad blanca a un conflicto permanente y absurdo. Mourinho toma sus decisiones y algunos, sus críticos, hablan de intereses particulares en esa y en otras ausencias en las alineaciones. Complicado de creer.

El carácter ganador del técnico lleva a pensar que es complicado creer que adopta decisión alguna en contra de los intereses del equipo pero debe dar un paso adelante, mostrarse conciliador y, como dijo su presidente, rebajar la tensión y recordar lo que dice Capello: el club está por encima de todos. Mourinho se irá y el Real Madrid continuará cumpliendo con su papel de ser uno de los mejores de la historia.