Es noticia
Benítez sucumbe al encanto de Abramovich y acepta el reto de entrenar al Chelsea
  1. Deportes
  2. Es lo que hay
Antonio Sanz

Es lo que hay

Por

Benítez sucumbe al encanto de Abramovich y acepta el reto de entrenar al Chelsea

Mañana del domingo 18 de noviembre. El teléfono de un colaborador de Rafa Benítez suena en Liverpool. Quien llama, Roman Abramovich, desea conocer la predisposición del

Foto: Benítez sucumbe al encanto de Abramovich y acepta el reto de entrenar al Chelsea
Benítez sucumbe al encanto de Abramovich y acepta el reto de entrenar al Chelsea

Mañana del domingo 18 de noviembre. El teléfono de un colaborador de Rafa Benítez suena en Liverpool. Quien llama, Roman Abramovich, desea conocer la predisposición del entrenador para entrenar esta temporada. El magnate ruso, que ya recibió una respuesta negativa este mismo año -en el mes de marzo-, muestra su disgusto por la derrota del Chelsea en el partido disputado veinticuatro horas antes frente al West Brom. Si Benítez contesta afirmativamente, las horas de Di Matteo están contadas. Se dan siete días de plazo para volver a dialogar tras los partidos de Turín y de Stamford Bridge ante el Manchester City. Sin embargo, la alineación, la imagen y el resultado ante la Juventus precipitan los acontecimientos.

Abramovich nunca confió en Roberto Di Matteo, a quien contrató como ayudante de André Vilas-Boas por su condición de ex jugador del club. De este modo, acercaba un poco al imberbe técnico portugués a la idiosincrasia de la entidad ‘blue’, que ya tenía referencias de su etapa como ojeador en el staff de Mourinho. Precisamente, la negativa del luso, tras lograr la cabeza de Valdano, permitió la contratación de su compatriota tras despedir a Carlo Ancelotti en los vestuarios de Goodison Park en Liverpool. El ciclo del italiano concluía y arrancaba el del tándem Vilas-Boas-Di Matteo. La destitución el pasado mes de marzo del hoy entrenador del Tottenham provocó el primer acercamiento de Benítez a Londres. Entonces, Rafa entendió que el riesgo de jugársela en tres meses era mayor que el rédito que podría conseguir. Se equivocó y ‘Robby’, a quien concedieron sorpresivamente el banquillo, aprovechó la oportunidad ganando la Liga de Campeones y la Copa de Inglaterra. El dilema del multimillonario transitaba entre mantener a un entrenador en el que nunca creyó o apostar por otra alternativa. Pero sus dos opciones favoritas le dieron calabazas: nuevamente Mourinho jugó con él -renovó con el Madrid porque mejoró económicamente el contrato de sus ayudantes- y Guardiola no cambió de idea y mantuvo el compromiso con su familia para no aplazar el prometido año sabático. Así que Di Matteo repitió sin respaldo ninguno, pero con dos títulos -incluida la ansiada orejona lograda en Múnich- en las alforjas.

El crédito le ha durado cuatro meses, con derrotas incluidas en los dos primeros títulos a los que aspiraban. Ninguna de las dos Supercopas descansa en las vitrinas de Stamford Bridge, y unido al escaso rendimiento que ha sacado a una plantilla reforzada con cien millones de euros le ha costado el cargo. El juego y los últimos resultados han gastado la paciencia del dueño que unilateralmente decidió prescindir del entrenador italiano tras caer duramente en Italia. Incluso, ordenó despedir al técnico en suelo transalpino. Es más, Di Matteo aprovechó para despedirse de los jugadores esa misma noche a su llegada al aeropuerto de Londres tras el retorno de Turín. 

Benítez se encontraba en Abu-Dhabi en un seminario internacional de ‘coaching’, con lo que le pilló a pie cambiado la contratación. Tomó un vuelo urgente a Londres para negociar las condiciones, siendo consciente de que repetiría el mismo escenario de interinidad planteado hace ocho meses. Lo que entonces resultó el principal problema para dirigir al Chelsea, en esta ocasión no ha sido obstáculo porque el tiempo sin trabajar ha aumentado y porque queda suficiente temporada como para pelear de verdad por la Premier, por la ‘Cup’, por la Copa de la Liga e incluso por el Mundialito de clubes el mes que viene. Benítez llega por segunda vez a un equipo que ha sido campeón de Europa. En 2010 reemplazó a ‘Mou’ en el Inter y ahora a Di Matteo en el Chelsea. Abramovich le vuelve a repetir discurso: el 30 de mayo analizaremos tu trabajo y decidiremos las dos partes si es óptimo seguir juntos, aunque cabe la posibilidad de que esa continuidad quede condicionada de una manera efectiva si logra la ansiada Premier, el trofeo que persigue también el entrenador madrileño. Si es capaz de ganarse en estos meses la confianza del dueño, el sueño del ruso de contar con Guardiola quedará difuminado. Precisamente, hasta el mes de mayo, Pep no tomará ninguna decisión al respecto, pese a la insistencia ‘blue’ y a las de sus competidores, Manchester City -con Beguiristain como gran soporte- o el AC Milan de Berlusconi.

El reencuentro de Rafa con Fernando Torres es otra de las sensaciones para la Prensa británica, que aguarda el despegue definitivo del ariete madrileño. Eso sí, en el Merseyside, donde reside Benítez y su familia, no están muy felices con la fuga del técnico a los ricos de Londres. En Stamford Bridge tampoco la afición ha acogido con efusividad el fichaje del entrenador, que tendrá carácter de interino. Con todo, el conocimiento y el empeño del ex del Valencia, Liverpool o Inter, entre otros, lo catapulta a una secuencia de éxito. Veremos si se hace con el dominio de un vestuario que siempre miró más hacia fuera que hacia dentro.

Mañana del domingo 18 de noviembre. El teléfono de un colaborador de Rafa Benítez suena en Liverpool. Quien llama, Roman Abramovich, desea conocer la predisposición del entrenador para entrenar esta temporada. El magnate ruso, que ya recibió una respuesta negativa este mismo año -en el mes de marzo-, muestra su disgusto por la derrota del Chelsea en el partido disputado veinticuatro horas antes frente al West Brom. Si Benítez contesta afirmativamente, las horas de Di Matteo están contadas. Se dan siete días de plazo para volver a dialogar tras los partidos de Turín y de Stamford Bridge ante el Manchester City. Sin embargo, la alineación, la imagen y el resultado ante la Juventus precipitan los acontecimientos.

Rafa Benítez