El piloto que más tiene que perder en 2015

“¿Vettel? Debemos esperar, al verdadero Vettel le veremos cuando con una máquina de sexto puesto llegue segundo, tercero o cuarto. Por ahora le hemos visto ganar con unmonoplaza capaz de ganar el título a cinco grandes premios del final”. A finales de 2011, Alonso lanzó un dardo al aire de caída lenta en el tiempo, y a la contra ante el brillante momento que disfrutaba el piloto alemán. Acababa de lograr su segundo título con once victorias.

Hoy, en 2015, Vettel afronta un gran desafío. Su gran prestigio está en juego. Es el piloto que más tiene que perder esta temporada. Y necesita que ese dardo de Alonso no acierte en el globo triunfalmente hinchado en Red Bull hasta 2013. Como Kimi Raikkonen le supere en Ferrari…

Confirmar su lugar en el olimpo de los grandes

“Conocemos de lo que es capaz el otro con un coche más o menos bueno, y cada uno tiene sus propias ideas sobre los otros pilotos, que con un coche bueno ganan pero no a la inversa. Y Hamilton no es así, ya ha demostrado saber vencer con un coche inferior”. Nadie mejor que los propios pilotos para calibrarsu verdadera dimensión. Alonso lanzó el guante en su día, con Hamilton como contrapunto y, también, alter ego.

No se trata de cuestionar el gran talento de Vettel, sino de confirmar su lugar en el olimpo de los grandes. De validar que su impresionante palmarésno es únicamente fruto de una ventaja técnica concreta. Solo un fuera de serie gana 18 de 20 carreras en la Fórmula BMW, o con un Toro Rosso en Monza, como fue su caso, por poner algunos ejemplos. Pero la estatura del piloto alemán podría menguar si otroaño másse le atragantan los monoplazas de la actual generación.

Una cicuta demasiado potente para digerir

Salvo el año de Toro Rosso, toda la carrera de Vettel en la Fórmula 1 se ha desarrollado en el mismo equipo, con el mismo monoplaza en evolución durante cuatro años. No seconocía su rendimiento en otro escenario técnico fuera de los famosos escapes de soplado. Antonio D’Acosta, uno de los pilotos de Red Bull, nos contaba el año pasadocómo el piloto alemán, en el simulador,era capaz de sacar en lascurvas un par de kilómetros por hora que casi resultaban asombrosos para los ingenieros. En algunas de sus victorias -Singapur 2013, por citar alguna- parecía que disparaba a gorriones con sus rivales.

Webber dejó de ser un rival para Vettel desde aquel polémico 2010.Hay quien puede pensar maliciosamente que fue ‘neutralizado’ tras sus enfrentamientos con el piloto alemán aquella temporada. Pero llegóun nuevo compañero y reglamento. Y que Daniel Ricciardo lograra tres victorias -algunas, como en Canadá, batiendo directamente al piloto alemán- por el ‘rosco’ de Vettel en 2014 es una cicuta demasiado potente de digerir paraquien ganaba 34 pruebas de las de 76 disputadasentre 2010 a 2013,con 40 poles y 53 podios en total.

Su versatilidad, puesta a prueba

Y, de la noche a la mañana... La pérdida de los escapes de soplado ylamenor carga del RB10ylos nuevos monoplazas fueron un 'crochet' a suhígado de piloto. Unidoal comportamiento de los frenos electrónicos, el piloto alemán aplicaba un pilotajeque castigaba el neumático. Un círculo vicioso del que no podía salir.Cabe reconocer la dignidad con la que llevósu cruz en 2014.

La experiencia del pasado año y la permanente evolución de la Fórmula 1 permitirán recuperarcierto grado de carga aerodinámica este año.Ferrari cuentacon el primer monoplaza de James Allison.Hasta qué punto el nuevo SF15-T será unguante para el estilo de Vettel está por ver. Quizás se confirme que su estilo es menos versátil de lo que podíamos imaginar tras su paso imperial por Red Bull.

Solo Vettel sabe en su fuero interno si es cierto, como insinuaba el propio Christian Horner, que dejaba también Red Bullantesu impotencia para batir aRicciardo. Una segunda temporada igual hubiera resultado demoledora.Ahora, enfrente, el piloto alemán tiene a Kimi Raikkonen, otro animal herido que necesita su propia redención.El finlandés sufresus propios problemas, llamadosPirelli. Con los compuestos y arquitectura introducidos a mitad de 2013, el finlandés perdió el norte de su brújula ya en la época final de Lotus.Con neumáticos casi iguales para esta temporada, puede que sus problemas persistan.

Un duelo interno crucial para ambos pilotos

Dos importantes figuras de Ferrari, ya fuera del equipo, se preguntaban recientemente con preocupación por el futuro inmediato de la Scuderia ante el tsunami organizativo que ha pasado por sus despachos. A este entorno ha llegado unVettelcuestionado por su derrota de 2014.Los dos pilotos de la Scudería, paradójicamente, comparten laderrota en 2014 frente a sus respectivos compañeros de equipo.

Por ello, el resultado del duelo interno en Ferrari será crucial para ambos. Si el finlandés plantara cara o superara al piloto alemán, el clavo de laimagen del alemán recibiría otro martillazo. De ser ala inversa, para Raikkonen sería un golpe alclavo en su ataúd.

Decía Mauricio Arrivabene que se daría por satisfecho si la Scuderia lograra al menos dos victorias en 2015. Si caen, finalmente, y no lo hicierandel lado deSebastian Vettel… las dudas de Alonsorecibirían una dura respuesta. La que, en el fondo, ya comparten Hamiltony el Samurai.