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El Atlético pierde en el campo, pero gana en la grada
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Javier Gómez Matallanas

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El Atlético pierde en el campo, pero gana en la grada

El estadio Vicente Calderón volverá a ser uno de los estadios con mayor animación de toda Europa. Y lo será sin los violentos, sin ese hatajo de indeseables...

Foto: Miembros del Frente Atlético, en Turín (Reuters)
Miembros del Frente Atlético, en Turín (Reuters)

En las tardes y noches grandes del Calderón, prácticamente en todos los partidos de Liga y de Champions, desde el fondo sur, la gente del Frente Atléticopedía al resto de aficionados que animase con ellos con un cántico como este: “Todo el estadio debe cantar”. Este pasado domingo, el primer día que se llevaron a efecto las medidas de expulsión de los radicales del fondo sur del Calderón, “todo el estadio” dejó claro que no les quieren junto a ellos.

Bastó un cuarto de hora del Atlético-Villarreal para saber que a la inmensa mayoría de los seguidores del Atlético les pareció sensacional la decisión del club de echar a los violentos del Frente Atlético. Del resto del estadio, no de la zona del fondo sur, partieron los primeros cánticos de la tarde. Y cantó todo el estadio aquello de “¡Ole, ole, ole Cholo Simeone!”, para continuar con eso de “Atleti somos nosotros” y cantar a capella el himno del club que arranca “Yo me voy al Manzanares…” Fue cuando se arrancó, todo el estadio, con lo de “¡Alé, Forza Atleti, alé!” cuando desde el fondo sur respondieron: “Si no me quieres, no cantes mis canciones” a lo que respondió, todo el estadio, con una sonora pitada para a continuación gritar “Atleti, Atleti, Atleti”.

Así transcurrió todo el partido hasta que Vietto marcó el 0-1, tras una magnífica maniobra ante Godín y perfecta definición ante Moyá. Entonces, en el fondo sur, empezaron a hacer aspavientos, parecían cortes de manga, a “todo el estadio”, como diciendo fastidiaros que el Atleti pierde porque no está el Frente aquí. Y fueron unos minutos raros, extraños, entre la indignación de “todo el estadio”porque su equipo perdía después de meses sin hacerlode local y el ventajismo de los del fondo sur que realmente se creen que el Atleti perdió porque ellos no animaron, como les pasa a los barra brava en Argentina.

El Calderón registró la peor entrada en Liga en muchos meses porque entre el frío y la polémica de los ultras muchos prefirieron verlo en casa. Esos que faltaron de los 50.000 fieles del Calderón volverán a su campo y animarán. “Todo el estadio” dice no a los violentos. El Atlético perdióporque se dio así el partido. No tuvo nada que ver con la derrota la ausencia del fondo sur de los radicales con sus símbolos prohibidos, su intolerancia y sus cánticos xenófobos.

Es cierto que fue un partido raro. Que el ambiente era distinto y chocante al habitual. Habrá más partidos extraños en el coliseo del Manzanares. Costará acostumbrarse a todos los colchoneros a la nueva situación. Pero no hay vuelta atrás. El Calderón volverá a ser uno de los estadios con mayor animación de Europa. Y lo será sin los violentos, sin ese hatajo de indeseables que piensan con faltas de ortografía, a los que no deben permitir juntarse en una zona de los estadios de fútbol nunca más. Ni en el Calderón ni en ningún otro campo de España.

En las tardes y noches grandes del Calderón, prácticamente en todos los partidos de Liga y de Champions, desde el fondo sur, la gente del Frente Atléticopedía al resto de aficionados que animase con ellos con un cántico como este: “Todo el estadio debe cantar”. Este pasado domingo, el primer día que se llevaron a efecto las medidas de expulsión de los radicales del fondo sur del Calderón, “todo el estadio” dejó claro que no les quieren junto a ellos.

Vicente Calderón