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El Barça quería al Madrid... y le tocó el Atleti
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Gemma Herrero

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El Barça quería al Madrid... y le tocó el Atleti

Si el termómetro de las redes sociales sirve para medir la reacción, en Barcelona joroba más que al Real Madrid le haya tocado el Wolfsburgo que su rival sean los de Simeone

Foto: Simeone y Luis Enrique se saludan en el Calderón. (Efe)
Simeone y Luis Enrique se saludan en el Calderón. (Efe)

Luis Enrique admitió todo tranquilo después de eliminar al Arsenal en la Champions que no tenía manías para el sorteo de cuartos porque “el único que no quiero que me toque es el Barça”. No dio más pistas el técnico del FC Barcelona, pero tanto la plantilla azulgrana como el entorno y la afición no veía con malos ojos un emparejamiento ahora con el Real Madrid… y les tocó el Atlético.

Si el termómetro de las redes sociales sirve para medir la reacción, joroba más que al Real Madrid le haya tocado el Wolfsburgo que el rival sean los de Simeone. No es una cuestión de soberbia, es que tienen motivos de sobra para sentirse moderadamente optimistas y aunque los rojiblancos presuman de ser el primer equipo de la capital y segundo en la Liga, para los culés, por historia y ADN, el rival continúa siendo el Madrid.

El FC Barcelona está viviendo un momento tan fabuloso que no es de extrañar que apeteciera un enfrentamiento ante el conjunto blanco -el rival por excelencia- también en Champions porque la sensación general es que podían darles un buen revolcón en diez días entre el partido de Liga y la eliminatoria europea. El segundo en la escala del morbo era el Bayern de Munich, por razones obvias: el eterno debate entre guardiolistas y antiguardiolistas. El Atlético era, antes del sorteo, simplemente un rival complicado junto al PSG y el Manchester City, mientras que Wolfsburgo y Benfica eran los deseados por todos.

Entre las razones por las que en Barcelona se habla más de la buena suerte del Madrid, que del Atlético está que Luis Enrique tiene tomada la medida al conjunto del Cholo y ha vencido en los seis enfrentamientos que han disputado, cuatro de Liga y dos en Copa del Rey, en las dos temporadas que lleva al mando del equipo. En esta, le ha marcado cuatro tantos, dos en el Vicente Calderón y dos en el Camp Nou y es un dato a tener en cuenta si se atiende al cómputo global de goles encajados por los rojiblancos en 29 jornadas disputadas: 12. De los 12 tantos que le han marcado al Atlético en Liga casi la mitad los ha logrado el Barcelona.

Por si los datos anteriores no fueran suficientes para insuflar optimismo a los azulgrana hay uno que no debe pasarse por alto: la víctima preferida de Leo Messi es el Atlético de Madrid. No hay equipo al que le haya metido más goles que al madrileño: 25 en 27 partidos. El argentino llega al momento crucial de la temporada finísimo y es de los que no olvidan fácilmente, así que el Atleti en general y Filipe Luis en particular deberían darse por avisados. El brasileño fue expulsado en el Camp Nou después de una dura entrada a Messi. Hace dos semanas, en declaraciones a una televisión de su país afirmó que el delantero era “el protegido de la prensa y la Liga”, declaraciones de las que no se arrepiente en absoluto. No solamente no las ha matizado, sino que tras eliminar el martes al PSV insistió: “Yo siempre digo lo que pienso. Hay pocos jugadores que dicen lo que piensan. Está Piqué, Arbeloa y algún otro. Sé que causa revuelo, pero hay jugadores a los que se trata de forma diferente y eso no quita para que sean los mejores del mundo”.

Messi es de los que pasan de sincerarse ante los medios y hablan sobre el terreno de juego, y detalles como las manifestaciones de Filipe Luis no le pasan por alto, así que, en principio, la verdad es que no parece un buen negocio que el mejor jugador del mundo afronte una eliminatoria de Champions con motivación extra.

La última vez que Barça y Atlético se enfrentaron en Europa fue hace tres temporadas, con el Tata Martino en el banquillo y también en cuartos de la competición, pero de muy poco puede servir aquella referencia de un equipo sin alma, en plena transición y con Messi lesionado. El desastre culé se coronó más tarde con un empate en el Camp Nou en la última jornada de Liga que dio el título al Atleti.

El Cholo comenzó la temporada enviándole dardos envenenados al vecino de la capital con aquellas declaraciones sobre que veía la Liga “peligrosamente preparada para el Madrid” y es el Barcelona el que le puede dejar a cero. Antes de que lleguen los cuartos de la Champions, el Barça pretende darle la última estocada a las esperanzas rojiblancas en el campeonato nacional. En el calendario están marcadas las dos próximas jornadas como cruciales para cerrar la Liga. Primero el desplazamiento a Villarreal, donde jugarán este domingo a las cuatro de la tarde con la duda de Andrés Iniesta, que no ha sido convocado por Del Bosque desvelando así que tiene problemas musculares, y después del parón por las selecciones, la visita del Real Madrid el sábado 2 de abril, tres días antes de recibir al Atlético en los cuartos. El Barça llega como un cohete al momento decisivo sumando 38 encuentros invicto, pero es ahora cuando tiene que rematar la faena y el Atlético es solo una piedra más en el camino.

Luis Enrique admitió todo tranquilo después de eliminar al Arsenal en la Champions que no tenía manías para el sorteo de cuartos porque “el único que no quiero que me toque es el Barça”. No dio más pistas el técnico del FC Barcelona, pero tanto la plantilla azulgrana como el entorno y la afición no veía con malos ojos un emparejamiento ahora con el Real Madrid… y les tocó el Atlético.

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