Es noticia
Por el buen camino forestal
  1. Economía
  2. Tribuna
Colaboradores EC6

Tribuna

Por

Por el buen camino forestal

La nueva Ley de Montes aporta un nuevo y eficaz instrumento de ordenación forestal, una propuesta eficaz dada su accesibilidad por coste y sencillez para los propietarios de minifundios

Foto: Montes de Valsaín, en Segovia (EFE)
Montes de Valsaín, en Segovia (EFE)

Faltan pocos meses para una conferencia clave para la lucha contra el cambio climático: la 21ª Conferencia de las Partes de Naciones Unidas, conocida como COP21, que se celebrará en París en diciembre. Allí se decidirán los compromisos que deberemos asumir si no queremos que la elevación de la temperatura del planeta provoque cambios irreversibles.

Creo, por tanto, que es un buen momento para hacer énfasis en la importancia de la lucha contra el cambio climático y en el esfuerzo que está haciendo España ante este desafío, con una herramienta tan potente como la nueva Ley de Montes o el próximo concurso para la construcción de nueva capacidad de energía renovable con biomasa.

El último informe de la OCDE sobre la evaluación del desempeño ambiental de España resaltaba que nuestro país “ha logrado avances impresionantes en muchos aspectos de su desempeño ambiental”, tal y como afirmó en su presentación en el MAGRAMA Ángel Gurría, secretario general de la organización.

Asistimos a otro importante avance con la aprobación de la nueva Ley de Montes. Así, la nueva legislación aportaun nuevo y eficaz instrumento de ordenación forestal, una propuesta eficaz dada su accesibilidad por coste y sencillez para los propietarios de minifundios. La ley supondrá, en consecuencia, un importante empuje a la ordenación del territorio forestal nacional.

Asimismo, la nueva Ley de Montes hace hincapié en la reactivación económica del sector forestal, fundamentalmente a través de la promoción de la agrupación de gestión de propietarios, posiblemente el principal reto al que se enfrenta el monte del norte ante el minifundio existente desde el punto de vista productivo. Y la ley lo hace recogiendo la interesante figura de las sociedades forestales, definida ya por la Xunta de Galicia en 2011, que pueden constituir el punto de partida para el reto de la agrupación.

Además, la Ley de Montes presta la mayor importancia a la lucha contra plagas y enfermedades, otro esencial y preocupante problema del monte español. Para poder apreciar en toda su magnitud la importancia de este problema, basta considerar que, en el caso del eucalipto, causa daños cercanos a los 28 millones de euros anuales en el norte de España, reduciendo el crecimiento de madera en un millón de metros cúbicos cada año y, por lo tanto, del CO2 que se fija en nuestras masas forestales.

Es en el monte donde podemos encontrar soluciones para el modelo energético que se convertirá, a buen seguro, en punto central del debate de la COP21

Destaco la importancia de esta nueva Ley de Montes porque es en el monte donde podemos encontrar soluciones para el modelo energético que se convertirá, a buen seguro, en punto central del debate de la COP21, por cuanto dos tercios de las emisiones GEI tienen su origen en la producción y uso de la energía. Nos encontramos ante la necesidad, en consecuencia, de avanzar hacia formas de producción de energía que supongan un recorte radical de las emisiones de carbono, pero que sean capaces de sostener el desarrollo económico y garantizar la seguridad del abastecimiento energético.

El reciente Informe Especial Energía y Cambio Climático de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) concluye que, con las propuestas de reducción de emisiones que ha recibido hasta la fecha, ya en 2040 se habrá emitido todo el CO2 previsto para el periodo 2000-2050. Además, el calentamiento global habrá alcanzado 2,6 ºC a fin de siglo. Ante esta preocupante situación, la Agencia propone una estrategia más ambiciosa, basada en tecnologías y políticas de probada eficacia. Quiere aumentar la eficiencia energética en industria, edificación y transporte, así como reducir progresivamente el uso de centrales de carbón menos eficientes.

La Agencia propone aumentar las inversiones en tecnologías renovables eléctricas, pasando de los 270.000 millones de dólares invertidos en 2014 a los 400.000 en 2030. Estas medidas se deben completar con la eliminación paulatina de las subvenciones a las energías fósiles de aquí a 2030, estimadas en 550.000 millones de dólares equivalentes a 115 $/t CO2, así como en reducir las emisiones de metano de la producción de petróleo y gas. Compárese esta última cifra con el actual precio de mercado de GEI de 6 $/t CO2 para ver las enormes posibilidades de las renovables en competencia leal.

En una época en la que la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático son necesidades globales apremiantes e irrenunciables, España puede plantearse ser una referencia en la transformación hacia una economía verde basada en su riqueza forestal. Una transformación que la nueva Ley de Montes y el acierto de algunas comunidades autónomas, como la gallega o la asturiana, que han sentado las bases para una mejor ordenación forestal, pueden convertir en realidad en un futuro próximo contribuyendo así a convertirnos en ejemplo de lucha contra el cambio climático y los grandes retos que afrontamos a escala global.

Para ello sería importante que el Ministerio de Industria, Energía y Turismo publique lo antes posible el nuevo concurso de 200 MW de generación con biomasa, un combustible natural, autóctono y renovable, que además crea y fija empleo rural.

España puede asistir en París a la COP21 no solo con un informe positivo de la OCDE, sino con una buena Ley de Montes y, además, con estas plantas de biomasa en construcción.

*Ignacio de Colmenares es vicepresidente y consejero delegado de Ence

Faltan pocos meses para una conferencia clave para la lucha contra el cambio climático: la 21ª Conferencia de las Partes de Naciones Unidas, conocida como COP21, que se celebrará en París en diciembre. Allí se decidirán los compromisos que deberemos asumir si no queremos que la elevación de la temperatura del planeta provoque cambios irreversibles.

Ence