Rubalcaba, erre que erre, seguirá denunciando el programa ‘oculto’ del PP

Las encuestas de los medios de comunicación coincidieron en dar como ganador del debate a Mariano Rajoy, pero en el PSOE nadie está dispuesto a conceder la derrota. Alfredo Pérez Rubalcaba no tiene pensado cambiar de estrategia, por lo que seguirá denunciando a diario la “ambigüedad deliberada” del programa del PP. Si en el ‘cara a cara’ el candidato se dedicó a leer pasajes del documento, ayer lo distribuyó a través de su cuenta en Twitter para alertar de su contenido a pardos, pensionistas y al colectivo homosexual.

La resaca del debate ha reforzado la estrategia socialista de alentar el temor a los recortes de  la derecha, que incluye también el retrato de Rajoy como un candidato incapaz de responder sobre su propio programa. Así, en su primer acto público tras el ‘cara a cara’, Rubalcaba volvió a incidir en que solo los socialistas garantizan salir de la crisis “sin dejar a nadie atrás”, mientras en internet su equipo lanzaba el lema tuitero  “Rajoy no responde” y “Alfredo no se esconde”. La cuenta del candidato del PSOE incluso pidió a Rajoy la celebración de un “ciberdebate”, con el objetivo de demostrar que su candidato seguía con ganas de pelea.

El hecho de que Rubalcaba mantenga su hoja de ruta de campaña es coherente con su tesis de que el debate ha salido bien, aunque contraste con la percepción del resultado que ha manifestado la opinión pública. Lo cierto es que ningún partido se puede permitir el lujo de aceptar haber salido derrotado de un ‘cara a cara’, y la estrategia socialista difícilmente puede cambiar en la recta final de la competición, después de semanas centrada en advertir a su electorado de las afiladas tijeras del PP.

 “Vamos a seguir con nuestro mensaje, comparando nuestras propuestas sobre empleo y estado de bienestar con la ambigüedad del PP. Rajoy escondió sus propuestas y no respondió a las preguntas de Rubalcaba. Parece que no conoce ni su propio programa”, señalaron fuentes de Ferraz. El equipo electoral del PSOE también reitera que Rajoy perdió credibilidad al leer sus intervenciones frente a un Rubalcaba que argumentaba sin papeles. Y con estos mimbres, los socialistas han construido la teoría, aún sin confirmar, del efecto movilizador del debate.

Según fuentes socialistas, un buen número de indecisos progresistas se habría inclinado por respaldar al PSOE tras ver la diferencia entre un proyecto socialdemócrata frente a otro, el popular, que no precisa sus planes. A falta de que las encuestas y, en última instancia, las urnas certifiquen el verdadero impacto del ‘cara a cara’, Rubalcaba parece conformarse con que la activación de parte del electorado socialista desencantado amortigüe la caída.

El debate de Jáuregui y Gallardón

Sin embargo, los estudios demoscópicos muestran que la fuga de votos que padece el PSOE es más abultada por la derecha que por la izquierda, por lo que el miedo a las políticas conservadoras no estarían dando frutos como en pasadas legislaturas. Como quedó reflejado en el último estudio de Gad3 para este diario sobre las tripas del CIS, “millón y medio de votantes de Zapatero en 2008 ahora votarían a Rajoy,  a los que  hay que añadir otros cuatrocientos mil que irían a UPyD y CiU. Por el contrario la fuga a todas  las formaciones de izquierdas se reduce a 800 mil votos,  que van principalmente a IU”.

Este miércoles, aunque con mucha menos expectación, el PSOE tiene otra oportunidad de comprobar si su estrategia cala en la audiencia. El encargado de poner en evidencia la agenda oculta popular será Ramón Jáuregui, pero enfrente no estará Rajoy, sino alguien más ducho en debates como Alberto Ruiz Gallardón. Y junto a ellos, Pere Macias (CiU), Josu Erkoreka (PNV) y un representante del grupo parlamentario que conforman IU, ERC e ICV, que será elegido entre Gaspar Llamazares (IU) o Alfred Bosch (ERC).  Además, al término de cada bloque se podrán escuchar las propuestas que respecto a la materia debatida han dejado grabadas los tres partidos que integraban el Grupo Mixto en la pasada legislatura (UPyD, Coalición Canaria y BNG).