Al Grano
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Los sindicatos piden en la calle lo que Rajoy en Bruselas
Hoy les propongo una especie de entretenimiento respecto al minuto y resultado de la política nacional. A partir de los sonidos de la calle. Y no
Hoy les propongo una especie de entretenimiento respecto al minuto y resultado de la política nacional. A partir de los sonidos de la calle. Y no me refiero al de los dos protagonistas del pacto por Europa, Mariano Rajoy (“Ya hay luz al final del camino”) y Alfredo Pérez Rubalcaba (“No somos iguales”), sino a los silbatos y tambores de las movilizaciones sindicales convocadas ayer en treinta ciudades españolas “por el empleo y la protección social, por una Europa más social y más democrática”. En teoría, nada que no esté en el cantable que el presidente del Gobierno va a llevar a la Cumbre Europea del 27-28 de junio.
Si sólo nos atenemos a la letra –el espíritu es otra cosa-, esas reclamaciones sindicales también figuran, casi con las mismas palabras, en el texto de la proposición no de ley apadrinada por Rajoy (Gobierno) y Rubalcaba (PSOE) que ha de votarse el día 25 con la muy probable adhesión de otros grupos parlamentarios. Ahí se lee que el impulso político prioritario debe dedicarse a “hacer frente a las altas tasas de desempleo y, en particular, el juvenil”. Ergo, se insta al Gobierno a “impulsar el crecimiento y el empleo aprovechando al máximo la capacidad inversora de la UE”. Todo ello, en el marco de esa Europa más social y más democrática reclamada ayer en la calle por los manifestantes en línea con la apuesta de los sindicatos españoles y europeos.
De hecho, el mandato que llevará Mariano Rajoy a la Cumbre incluye la exigencia de que la UE impulse “el papel de los agentes sociales”, a fin de favorecer su participación en el desarrollo de la “dimensión social europea”. Todo eso pasa, según la posición común Gobierno-PSOE que el presidente español defenderá en Bruselas, por “asegurar un alto nivel de protección social, proteger los derechos laborales y fomentar los servicios públicos, como la sanidad y la educación de calidad”.
No me invento nada. Ahí están los lemas de las manifestaciones callejeras de ayer (100.000 personas, según los organizadores) y sus reiteradas apelaciones al máximo responsable del Gobierno para que defienda en la Cumbre políticas a favor del crecimiento y el empleo. Y ahí están las demandas del pacto Rajoy-Rubalcaba que coinciden con las de la movilización sindical de ayer ¿Será posible tan saludable sintonía entre la España de la calle y la de los despachos? Qué más quisiéramos.
Hoy les propongo una especie de entretenimiento respecto al minuto y resultado de la política nacional. A partir de los sonidos de la calle. Y no me refiero al de los dos protagonistas del pacto por Europa, Mariano Rajoy (“Ya hay luz al final del camino”) y Alfredo Pérez Rubalcaba (“No somos iguales”), sino a los silbatos y tambores de las movilizaciones sindicales convocadas ayer en treinta ciudades españolas “por el empleo y la protección social, por una Europa más social y más democrática”. En teoría, nada que no esté en el cantable que el presidente del Gobierno va a llevar a la Cumbre Europea del 27-28 de junio.