Es noticia
Confesiones de un líder del PP: “Estamos en Orión viendo cómo se destruye la Tierra”
  1. España
  2. Caza Mayor
Nacho Cardero

Caza Mayor

Por

Confesiones de un líder del PP: “Estamos en Orión viendo cómo se destruye la Tierra”

La cúpula del PP tiene la impresión de que el aquelarre montado por Rajoy mañana para arengar a los suyos y revisar las cuestionadas políticas de comunicación y marketing llega demasiado tarde

Foto: Clausura de la convención nacional del PP. (EFE)
Clausura de la convención nacional del PP. (EFE)

En el PP se respira ambiente de funeral. Sin apenas ya brizna de fe, lo único que les queda es esperar resignados la llamada de la noche del 24 de mayo para ir al tanatorio y empezar a repartir pésames por doquier. Se ha extendido esa sensación luctuosa de que no hay nada que hacer, que las cartas están echadas, que la debacle en las municipales y autonómicas va a ser de órdago a la grande. Preguntado sobre esta situaciónun alto dirigente del PP, hoy en retirada, lo describía muy gráficamente: “Aquí estamos, desde la nave de Orión, viendo cómo se destruye la Tierra”.

La cúpula del PP tiene la impresión de que el aquelarremontado por Mariano Rajoy mañana martes con seiscientos altos cargos del PP para arengar a los suyos y revisar las cuestionadas políticas de comunicación y marketingllega demasiado tarde y apenas servirá de ibuprofeno para soportar el puñetazo que les viene directo a la sien. “Lo peor de todo ha sido nuestra incapacidad para reaccionar. Estamos recibiendo una paliza en mitad del cuadrilátero y no nos hemos inmutado. Da pena ver cómo estamos encajando los golpes. Al final, terminaremos por caer”, explica este dirigente.

Existe la idea generalizada entre los inquilinos de Génova 13, entre los barones que concurren a las próximas autonómicas, entre los militantes que se van a batir el cobre para obtener quién sabe si una concejalía, de que el Gobierno los ha abandonado a su suerte. Pero no ahorani hace un año, sino desde el comienzo de legislatura. Arguyen que la estrategia trazada desde Moncloa por Arriola, gurú demoscópico del PP, se ha diseñado con la vista puesta única y exclusivamente en las generales y pasa por sacrificar los comicios de mayo para ‘desenmascarar’ a Podemos y Ciudadanos.

Existe la idea generalizada entre los barones que concurren a las próximas autonómicas de que el Gobierno los ha abandonado a su suerte

“De los resultados andaluces podemos extraer dos conclusiones: una positiva y otra negativa”, continúa este alto dirigente del partido. “Por el lado positivo, el Gobierno respira aliviado porque el PSOE tendrá que pactar con Podemos o Ciudadanos. Si lo hace con los primeros, destapamos al verdadero Pablo Iglesias, que quedaría retratado como otro más de la ‘casta’; si lo hace con los segundos, haríamos ver que Albert Rivera no vale como segunda marca de la derecha. Por el lado negativo, desde la óptica de los que componemos el PP, nos estamos dando cuenta de que Rajoy está dispuesto a inmolarnos a todos en mayo, igual que ha inmolado a Moreno Bonilla, para ir desmontando a sus rivales políticos y poder gobernar tras las generales”.

El hecho clave es que en las elecciones autonómicas y locales va a ser más complicado que los populares obtengan mayorías absolutas que Florentino Pérez se embuta la camiseta de Messi. En este contexto, el PP va a tener muy difícil poder gobernar “porque nadie nos quiere. Nadie quiere pactar con nosotros. Nos hemos convertido en el nasty party del panorama político español”.

¿Qué sucederási el PP pierde Extremadura y Castilla-La Mancha? ¿Y si pierde también la Comunidad Valenciana ante la imposibilidad de pactar con nadie? ¿Y si se queda, incluso, sin la Comunidad de Madrid? Más aún, ¿qué pasaría si se quedara sin la Comunidad de Madrid pero Esperanza Aguirre se hicieracon el Ayuntamiento? ¿En qué situación quedaría Rajoy? ¿Qué haría entonces la alcaldesa?

Aguirre es una máquina de ganar elecciones gracias a su política de comunicación y a su capacidad para empatizar con el electorado

El hecho de que el presidente del partido haya tenido que hacer de tripas corazón para nominar a Esperanza Aguirre –de la que no se fía ni cuando va al baño– como candidata al Consistorio madrileño denota la debilidad del PP. Aguirre, igual que el PSOE andaluz, es una máquina de ganar elecciones. Lo es gracias a su política de comunicación, a su habilidad para evitar que le salpique la Gürtel y los Granados igual que Susana Díaz ha escapado de los ERE, a su capacidad para empatizar con el electorado, a su efectiva campaña electoral, que resulta a veces populista, a veces provocadora, pero que es justo lo que le falta al Gobierno de esta nación, que se muestra indolente como un témpano de hielo e incapaz de hacer llegar su discurso, que lo tiene, al Juan Español que se encuentra frente al televisor.

“Esperanza y Mariano tienen más puntos en común de lo que se cree. Por poner un ejemplo, ambos están a favor de bajar impuestos y poseen un discurso similar respecto a Cataluña. No son muy distintos”, reflexiona este alto cargo del partido. “Lo que sucede es que Esperanza considera a Rajoy un pusilánime, cree que podría haber hecho más por el partido, haber evitado esta situación. Le culpa, y no es la única, de haber alentado el nacimiento de formaciones como Podemos para debilitar al PSOE”.

¿Cree posible que le dispute a Rajoy el liderazgo del partido en un futuro próximo? “Si se produce una debacle territorial del PP y ella alcanza la alcaldía, será the most powerful woman in the world. Y entonces, en ese punto, cualquier cosa será posible”.

En el PP se respira ambiente de funeral. Sin apenas ya brizna de fe, lo único que les queda es esperar resignados la llamada de la noche del 24 de mayo para ir al tanatorio y empezar a repartir pésames por doquier. Se ha extendido esa sensación luctuosa de que no hay nada que hacer, que las cartas están echadas, que la debacle en las municipales y autonómicas va a ser de órdago a la grande. Preguntado sobre esta situaciónun alto dirigente del PP, hoy en retirada, lo describía muy gráficamente: “Aquí estamos, desde la nave de Orión, viendo cómo se destruye la Tierra”.

Política Mariano Rajoy Esperanza Aguirre