Es noticia
Seguro que hay algo más
  1. España
  2. Desde San Quirico
Leopoldo Abadía

Desde San Quirico

Por

Seguro que hay algo más

En pleno Mundial, oigo himnos y veo a la gente cantar. Los equipos y los forofos.Y me da envidia. Porque nosotros, o sea, España, tenemos un

En pleno Mundial, oigo himnos y veo a la gente cantar. Los equipos y los forofos.

Y me da envidia. Porque nosotros, o sea, España, tenemos un himno que a mí me parece precioso. Y, además, me emociona, y se me hace un nudo en la garganta. Pensé que era la edad. Pero hace muchos años también me pasaba.

En nuestro paístenemos otras preocupaciones. Lo de la Patria es para los viejos chochos o para los no viejos nostálgicos, que algunos hasta se sabían (se saben, nos sabemos) la letra que compuso –¡horror de los horrores!– José Mª Pemán, y que, entre otras cosas, decía: "Gloria a la Patria que supo seguir, sobre el azul del mar, el caminar del sol". Ya sé que eso es una vaguedad, como la de tantos himnos nacionales, quasi nacionales o pueblerinos que sufrimos ahora.

No estamos ahora para himnos. Estamos:

1. Para rebajar el déficit (más ingresos, menos gastos y, si no llegamos, más endeudamiento) hasta llegar a 30.000 millones en 2016.

2. Para intentar desendeudarnos algo, porque cuando se debe lo mismo que se produce, los intereses te comen. Y menos mal que ha bajado la prima de riesgo.

3. Para conseguir que nuestros bancos, los gordos, se pongan guapos y así consigan pasar a la supervisión del Banco Central Europeo (BCE).

4. Para plantearnos si podemos hacer algo para reducir el paro o decidimos de una vez que somos un país pobre, con salarios pobres, y con un paro estructural de 5.935.600 personas, que no rebajaremos porque todavía no hay crédito, porque las reestructuraciones son brutales (miles de personas), porque la tecnología se va comiendo puestos de trabajo (ya llevamos dos huelgas de taxis por Uber), porque el empresario, si se arregla contratando dos personas,no contrata tres. Y así.

5. Para despertarnos cada día con los chanchullos corruptos que hacen algunos (parece que bastantes).

6. Para ver que, animados por los que quieren tener derecho a decidir, todos queremos tenerlo, y cuando se habla de España no se sabe a qué se refieren.

7. Para...

8. Para...

Y, claro, a eso, no hay quien le haga un himno, y no hay nadie a quien se le humedezcan los ojos ni jugador de fútbol que –primas aparte– esté dispuesto a jugarse la tibia para meter un gol a Holanda, por ejemplo.

Y somos un pueblo pragmático, realista, de los de déjese usted de milongas, que si no lo veo no lo creo. En dos palabras, unos "desgraciaos", incapaces de ver más allá de nuestras narices y de ilusionarnos por nada grande.

Me desmoralizó ayer un chaval de 20 añosque lleva dos luchando –es un decir– contra una carrera. Sus objetivos en la vida son aprobar unas dos asignaturas del saco que tiene pendientes y disfrutar del verano.

¡Vete a decirle a este pájaro que se ilusione por algo, que se emocione por algo, que se le humedezcan los ojos por algo! En cuanto consiga que sus padres suelten la poca pasta que pueden soltar, ¡a vivir! Y después, a seguir viviendo, que uno es joven.

Hay que hacer un himno que hable de metas grandes, ambiciosas, ilusionantes, bonitas. Que animen a la gente, incluido mi amigo de ayer, a que intenten volar como águilas.

Que aves de corral tenemos de sobra.

En pleno Mundial, oigo himnos y veo a la gente cantar. Los equipos y los forofos.

Salarios de los españoles Paro