¡Al infierno con Toxo y Méndez!

Me cuenta una amiga funcionaria que durante los ocho años de Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero tan sólo le llegó un e-mail enviado por la UGT y el motivo estaba relacionado con un edificio público. O sea, una chorrada, dicho sin ambages. Pero, desde que gobierna el PP le fríen a e-mails todos los días, hasta el punto de que ha tenido que catalogarlos como spam para que no le saturen el servidor. Y, por supuesto, todos los correos son contra el Gobierno de Rajoy, sobre lo malo que es, lo vendido que está a la patronal, lo mucho que está haciendo sufrir a los trabajadores… ¡Pues no será a vosotros, malditos vástagos ideológicos de una vulgar meretriz llamada oportunismo! Esto empieza a resultar indignante; propio de la peor calaña mafioso-sindical.

A Cándido Méndez y Fernández Toxo les importa una mierda que el Gobierno haya rebajado la indemnización por despido. Lo único que les preocupa, lo único que altera sus nervios, es que el Gobierno haya recortado su poder en la negociación colectiva, que les haya apartado del monopolio de la formación, que les haya recortado un 20% las subvenciones… Piensan que echándole un pulso al Gobierno de Mariano Rajoy van a conseguir hacerle torcer el gesto. ¿Pues saben lo que les digo? Que van listos, porque esta vez han chocado con un Ejecutivo que está dispuesto a llevar adelante sus planes, porque está convencido de que es lo que tiene que hacer en beneficio de los trabajadores; no como estos líderes sindicales, que lejos de procurar el beneficio de los trabajadores lo que han cosechado son muchos beneficios a costa de ellos. Beneficios que van a seguir cosechando porque de cada ERE que se produce en una empresa los sindicatos se llevan un buen pico, una de estas cosas que nadie con dos dedos de frente entiende pero que hace comprender la razón ética por la que los señores Toxo y Méndez nunca se han preocupado por los parados y han tenido tanto que ver, pero tanto-tanto, en que este país siga teniendo una estructura de mercado laboral anquilosada que debería ser a ellos a los que se pusiera de una vez por todas de patitas en la calle por ineptos e incompetentes.

Los grandes empresarios, los Entrecanales, los Botín, los March, los Florentino Pérez, los Del Rivero… Todos esos eran los amigos de Zapatero, los amigos del PSOE, que se ha pasado la vida cultivando las relaciones con los poderosos

Porque sino, ¿de qué piensan ustedes que iba Méndez a comer a diario en restaurantes de cinco tenedores? O, ¿a cuento de qué se iba a ir Toxo de vacaciones en cruceros de lujo?; ¿qué moral de saldo es la que guía a estos personajes? Miren, la pregunta es clara y contundente: ¿por qué tenemos que pagar de nuestros bolsillos, de nuestros impuestos, las algaradas de unos sindicalistas que lejos de pensar en el bien común solo piensan en su propio bien? El Gobierno debería retirarles no el 20%, sino el 100% de toda subvención que reciban de los Presupuestos Generales del Estado. Y que hagan lo mismo la mayoría de las comunidades autónomas ya gobernadas por el PP y las que vengan, y que a partir de ese momento se financien con las cuotas de sus afiliados porque, y ese es el quid de la cuestión, ¿a quién coño se creen que representan? No a mí, ni a los once millones de españoles que votaron por el cambio en las urnas mientras estos chulos del lupanar sindical se frotaban las manos pensando que por fin iban a volver a tomar las calles.

Y es que estos tíos, que durante ocho años le han estado haciendo el juego al Gobierno socialista, que hasta Méndez se había convertido en casi un vicepresidente in péctore, que no han levantado la voz ni una solo vez ante situaciones absolutamente dramáticas, que tan solo se atrevieron a hacer una huelga general casi pactada con el Gobierno para que saliera como salió, que son tan responsables como el anterior Ejecutivo de la situación que ahora mismo atraviesa este país, estos tíos se atreven a convocar manifestaciones casi diarias y a amenazarnos a los españoles con una huelga general… ¿dónde se ha visto semejante desfachatez?

Primero deben pedir perdón por esos 5,3 millones de parados, por esos 112.000 parados nuevos -casi 4.000 diarios- del mes de febrero apuntados al INEM, y después irse a su casa y dejarnos en paz de una puñetera vez y, por favor, que venga alguien que de verdad tenga un mínimo sentido de la responsabilidad, un mínimo interés por el bien común, a ponerse al frente de estos sindicatos que solo sirven a los intereses políticos de sus dueños, que nos son otros que los partidos de izquierda.

Pero, ¿dónde dice que yo tenga que financiar a semejante calaña?; ¿por qué tengo que pagarles las mariscadas?; ¿a cuento de qué tengo que aceptar que se llenen los bolsillos de cientos de millones en los consejos de administración de las cajas y luego vengan a decirme lo malos que son los empresarios? Pero, ¿de dónde han salido estos tipejos?; ¿quién les ha mandado actuar en nombre de la mayoría social cuando no la representan? Pero, ¿en qué siglo vivimos que todavía vienen estos carpetovetónicos a seguirnos contando la murga de que el empresario es malo y el trabajador el bueno, que si los ricos y que si los pobres, que los malos son los de derechas y los buenos los de izquierdas? Pero, de verdad, ¿a quién quieren engañar, en un país en el que la mayoría de los empresarios son PYMES y autónomos que están sufriendo lo indecible para salvar sus empresas y los puestos de trabajo?; ¿pero es que nadie se da cuenta de que el verdadero empresario es el propietario del café de la esquina, de la tienda de periódicos, del comercio de lencería? Ese es nuestro verdadero tejido empresarial, esa es la gente que vota mayoritariamente al Partido Popular…

Los grandes empresarios, los Entrecanales, los Botín, los March, los Florentino Pérez, los Del Rivero… Todos esos eran los amigos de Zapatero, los amigos del PSOE, que se ha pasado la vida cultivando las relaciones con los poderosos… Lo hizo Felipe, lo hizo Zapatero y lo seguirán haciendo siempre que gobiernen aunque luego tengan la desfachatez de echárselo en cara a los demás… ¿Y ahora nos quieren amargar la vida movilizando a sus liberados sindicales, esos que cobran sueldos sin dar un palo al agua, para que se manifiesten a diario contra el Gobierno del PP?; ¿ahora nos amenazan con helenizar al país porque este Gobierno quiere intentar arreglar todo lo que ellos han estropeado, y sólo, sólo por una cuestión de poder? Al infierno con ellos, que se pudran en sus llamas… Ellos tienen la culpa de lo que está pasando en este país, y no tienen ningún derecho, ninguno, a erigirse en líderes de la protesta. A lo único que tienen derecho es a elegir la pierna con la que habría que darles una patada en el culo.