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Viñals, "un hombre que da sopas con honda a MAFO", vivió ayer su primer día como alto funcionario del FMI en Washington
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Viñals, "un hombre que da sopas con honda a MAFO", vivió ayer su primer día como alto funcionario del FMI en Washington

A las 9 de la mañana de ayer en Washington (3 de la tarde en España), José Viñals, protagonista de una polémica dimisión como subgobernador del

A las 9 de la mañana de ayer en Washington (3 de la tarde en España), José Viñals, protagonista de una polémica dimisión como subgobernador del Banco de España (BdE), se sentó por primera vez en su despacho del Fondo Monetario Internacional (FMI) en la capital federal norteamericana, adonde acababa de llegar procedente de Madrid. De hecho, se supone que Viñals logró dormir en el vuelo para poder cumplir su primer día de trabajo, porque todavía el martes 14, es decir, anteayer, se despedía en Madrid de quienes han sido sus compañeros en el caserón de la calle Alcalá esquina Cibeles.

Se cierra así, al menos provisionalmente, uno más de los muchos capítulos que, rodeados de misterio, acontecen en la vida política y económica española. El pasado 25 de marzo, Viñals anunció por sorpresa que abandonaba el BdE para incorporarse al FMI en calidad de consejero financiero y director de Asuntos Monetarios y Mercados de Capitales, poniendo punto final al proceso de distanciamiento vivido en el caserón de Cibeles con su inmediato superior, el gobernador Fernández Ordóñez, en asuntos tales como la intervención de Caja Castilla-La Mancha.

“Lo normal es que aprovechara la primera oportunidad que tuviera para abandonar su cargo en Madrid”, asegura un alto funcionario del Banco que le conoce bien. Viñals no es un político, como Ordóñez, sino un técnico, un experto en macroeconomía de reconocido prestigio internacional, más volcado en el estudio de la evolución del PIB chino para compararlo con el de USA que en preocuparse de si la publicación de tal o cual dato por el propio BdE va a perjudicar o no a Zapatero. Como experto en política macroeconómica, lo cierto es que “Viñals da sopas con honda a MAFO”. Eso sí, “a Viñals las Cajas de Ahorros le importaban un pimiento”.

¿Ninguneado por Ordóñez? “Sería el único funcionario del Banco, alto o pequeño, a quien MAFO no hubiera ninguneado…” Conviene aclarar, sin embargo, que el trato entre ambos, al menos de puertas afuera, es decir, ante testigos, “ha sido siempre exquisito, sin que ninguno de ellos dejara traslucir la existencia de tensiones”. Y entonces, ¿Por qué lo eligió como subgobernador, sabiéndolo tan distinto y distante?

“Porque, tras las protestas que el nombramiento de MAFO como gobernador provocó en el Partido Popular –que lo acusó de ser un militante socialista puro y duro-, José Viñals era el alto cargo del Banco que más cerca estaba del PP y más lejos del PSOE”, no obstante lo cual la calle Génova rechazó de plano cualquier compromiso con ese nombramiento, desbaratando la estrategia de un Solbes que pretendió de este modo dar a entender que, como había sido norma hasta Zapatero, al subgobernador lo había nombrado la oposición.

Más próximo a Rajoy que a Zapatero

Lo cual no es óbice para enfatizar que, en efecto, Viñals está mucho más cerca de los postulados ideológicos de un Rajoy, sobre todo en cuestiones de moral tales como el aborto, que de un Zapatero. En suma, un personaje muy distinto a MAFO, que ha permanecido estos años totalmente alejado de los focos, casi bajo tierra, viviendo un poco del prestigio acumulado entre el personal del Banco.

De hecho y porque se sabían distintos, Ordóñez cambió radicalmente el reparto de tareas que tradicionalmente habían venido desempeñando el gobernador y su segundo, de modo que Viñals siguió cargándose de lo que le gustaba, es decir, de las relaciones del BdE con los distintos organismos internacionales, de la “política exterior” del Banco, en suma, mientras el propio Ordóñez se adjudicaba la gestión de las tripas de la entidad y de la  Economía española, en estrecho contacto con su “padrino”, Pedro Solbes, y siempre pendiente de no perjudicar los intereses electorales de Zapatero.

En los últimos tiempos, y a cuenta de la grave enfermedad de su madre, recientemente fallecida, Viñals se vio casi obligado a permanecer en España, viajando todos los fines de semana a Valencia, a pesar del creciente distanciamiento con MAFO. Desaparecido el motivo que le retenía aquí, Viñals ha vuelto a levantar el vuelo. Acaba de posarse en Washington, y parece que para mucho tiempo.

A las 9 de la mañana de ayer en Washington (3 de la tarde en España), José Viñals, protagonista de una polémica dimisión como subgobernador del Banco de España (BdE), se sentó por primera vez en su despacho del Fondo Monetario Internacional (FMI) en la capital federal norteamericana, adonde acababa de llegar procedente de Madrid. De hecho, se supone que Viñals logró dormir en el vuelo para poder cumplir su primer día de trabajo, porque todavía el martes 14, es decir, anteayer, se despedía en Madrid de quienes han sido sus compañeros en el caserón de la calle Alcalá esquina Cibeles.

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