Jaguar sustituye al Tercer Mundo por España en el reparto de las ayudas a los pobres

Los tiempos, como en la canción de Dylan, están cambiando. Pero, esta vez, a peor. Al menos en España. Un ejemplo lo pone de manifiesto. Jaguar Land Rover, la prestigiosa firma de automóviles, ha desarrollado en los últimos años –como otras muchas compañías– un Plan de Responsabilidad Social Corporativa. Hasta aquí, nada nuevo.

Lo realmente relevante es que este año en lugar de implantar proyectos de desarrollo en países del Tercer Mundo, lo hará en España. La compañía ha considerado que la situación socioeconómica del país lo requiere, lo que ha aconsejado a Land Rover desviar su ayuda.

No se trata de una cantidad pequeña: un millón de euros que antes iban destinados a países con pobreza absoluta y que ahora se quedarán en España. La firma automovilística considera que en la actual situación del país hay que resolver los asuntos más cercanos, y de ahí su iniciativa, que será presentada en los próximos días.

Los datos, desde luego, avalan la idea. Según la EPA, nada menos que 1,97 millones de hogares tienen a todos sus miembros en paro, mientras que en otros 4,92 millones no hay ningún activo (ocupados o parados). Y por eso, lo que pretende la compañía con ese ‘kilo’ es ayudar a las familias en las que todos sus miembros estén desempleados para formarlos y buscar una salida profesional.

Un reciente estudio estimaba que en España había algo más de 2,8 millones de niños que habían caído en situación de pobreza o en peligro de exclusión social. Y es que, definitivamente, los tiempos están cambiando. Pero a peor.