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La capea que prometía Mr. Happiness y que pudo acabar en tragedia
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La capea que prometía Mr. Happiness y que pudo acabar en tragedia

Las comparaciones pueden resultar odiosas pero muchos de los afectados no dudan en recordar la tragedia del Madrid Arena para clamar al cielo por lo que

Las comparaciones pueden resultar odiosas, pero muchos de los afectados no dudan en recordar la tragedia del Madrid Arena para clamar al cielo por lo que pudo ocurrir el pasado sábado con la capea deMr. Happiness, una tienda de ropa online que ahora trata de ‘capear’ el temporal de críticas bajo el argumento de “todos somos humanos y todos cometemos fallos”.

En el caso que ocupa debieron ser muchos y muy seguidos los errores que han provocado la airada reacción en las redes sociales ante la organización de un evento que acabó como el rosario de la aurora para buena parte de sus invitados. Cerca de3.500 chicos y chicas, en teoría mayores de edad, habían sido convocados por la página web del tal Mr. Feliz, en su traducción literal al castellano, para disfrutar de una capea en la tarde del pasado sábado cerca deFuentidueña del Tajo.

La ocasión se presentaba propicia para todos los bolsillos dado el módico precio de 35 euros, que comprendía la fiesta, la cena e incluso el transporte en autobús desde Madrid. Ni que decir tiene quelas copas estaban incluidas en el lotey probablemente eran uno de los principales atractivos de la oferta, porque del resto poco más se supo. La comida escaseó, como estaba previsto, pero lo peor vino después, cuandoarreció la tormenta y muchos de los jóvenes se quedaron a la intemperiey tirados para volver a Madrid.

El resultado del estropicio fue que cientos de chicos empapados hasta los huesos, y no todos serenos, tomaron las de Villadiego, que en esta ocasión fue ponerseen marcha para Madrid, andando por el arcénde la carretera de Valencia a altas horas de la madrugada. La espontánea comitiva fue ampliándose de manera peligrosa hasta provocar laintervención de la Guardia Civil, obligada a cortar el tráfico en prevención de males mayores.La llegada del Samurcon la distribución de mantas contribuyó a sosegar los ánimos de los viandantes, que regresaron a sus casas ateridos y después de una larga noche, convertida en odisea.

Las comparaciones pueden resultar odiosas, pero muchos de los afectados no dudan en recordar la tragedia del Madrid Arena para clamar al cielo por lo que pudo ocurrir el pasado sábado con la capea deMr. Happiness, una tienda de ropa online que ahora trata de ‘capear’ el temporal de críticas bajo el argumento de “todos somos humanos y todos cometemos fallos”.