Felipe VI conoce el retrato ‘fantasma’ de Antonio López

El viernes pasado tenía audiencia y ganas de conocer el polémico retrato de su familia en el que el pintor Antonio López lleva enfrascado 20 años. Felipe VI se ha visto ahí, por primera vez, junto a su madre. En medio, el rey Juan Carlos y a su derecha, las hermanas del nuevo monarca. Hasta hace unos días el pintor zascandileaba todavía en Palacio, dando retoques aquí y allá, porque conoce bien cuándo empieza, no cuando acaba. El nuevo rey se habrá visto muy joven…

Antes de despachar con militares en palacio, improvisó y pasó por las salas en las que se ultima el montaje de una de las exposiciones estrella del otoño: El retrato en las Colecciones Reales. De Juan de Flandes a Antonio López, que abre sus puertas el próximo 4 de diciembre, primer proyecto conducido por el primer director de las Colecciones Reales, José Luis Díez, con Carmen García-Frías y Javier Jordán como comisarios. Felipe VI quería ver el de López y, de paso, revisó toda la muestra.

Nadie ha podido ver el famoso retrato, del que solo hay una foto, del año 2011, en la que aparece medio envuelto en papel estraza en su estudio y que está incluida en un libro publicado por TF Editores. Estos días, tal y como ha podido saber este periódico, cuelga ya en el lugar que le corresponde en la exposición, pero tapado. Un fino papel blanco oculta la imagen del cuadro, lo vuelve ‘fantasma’. Al parecer, Patrimonio Nacional quiere mantener en secreto el enorme lienzo para garantizar el impacto el día que sea presentado a la prensa.

El retrato de la familia real de Juan Carlos I comparte estancia –en la última de las 13 Salas Génova que componen el recorrido– con la un cuadro retrato que hizo Salvador Dalí del padre de Felipe VI. Pero el diseño del montaje subraya, sobre todo, la obra inacabada de López, que respira bajo la atenta mirada de vigilantes y cámaras para que no salga ni una imagen de la habitación.

Arte muy real

El retrato en las Colecciones Reales es un viaje por la historia del arte cortesano, con las mejores piezas de las colecciones de Patrimonio Nacional. Ni un solo préstamo, sólo obras propias, casi un centenar. Es la prueba de fuego del futuro Museo de las Colecciones Reales, que ampliará la senda monárquica completa, desde los Austrias a los Borbones. Habrá obra de Velázquez y se podrá ver el retrato de Alfonso XIII de Sorolla que se ha quedado sin ir a la Fundación Mapfre. De Isabel la Católica a Juan Carlos I.

José Luis Díez ha puesto la máquina a pleno rendimiento, con una revisión, actualización y datación de todas las piezas en un catálogo de referencia y, sobre todo, con un intenso trabajo desarrollado por el taller de restauración en el último año, que ha dejado a las pinturas de los almacenes listas para su exhibición.