:format(png)/f.elconfidencial.com%2Fjournalist%2F3fc%2F867%2Fcda%2F3fc867cda0982a07fef824d38ea5725a.png)
El Confidente
Por
Buruaga paga a sus tertulianos casi cinco veces más que TVE
Los 500 euros por programa son la mayor cantidad que se paga actualmente en todo el panorama audiovisual español, incluyendo los dos grandes grupos privados (Mediaset y Atresmedia)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fc5d%2F2e5%2Ff6c%2Fc5d2e5f6cf3a391a1e5fc77373357a9b.jpg)
El programa televisivo de Ernesto Sáenz de Buruaga Así de claro –que produce Pulso, la filial de Secuoya y por cuyas 27 entregas la cadena pública desembolsará la friolera de 2,1 millones de euros– paga a sus tertulianos 500 euros por cada sesión a la que acuden, exactamente 4,5 veces más que lo que cobran cuando van a programas producidos por la propia Televisión Española o Radio Nacional de España.
Es la mayor cantidad que se paga actualmente en todo el panorama audiovisual español, incluyendo los dos grandes grupos privados (Mediaset y Atresmedia).
Los dos primeros programas han obtenido una muy pobre cuota de audiencia (6,5% y 5,7% respectivamente) cuando el propio Buruaga afirmaba antes de comenzar las emisiones que estimaban obtener un 12% o 13%. El Consejo de Informativos ha pedido reiteradamente la retirada de dicho programa de la parrilla de TVE.
El fracaso ha puesto en pie de guerra a los trabajadores de la Casa, especialmente a sus sindicatos, que amenazan a TVE con llevarla a los tribunales por lo que parece ser una apuesta personal del presidente, José Antonio Sánchez, instigada por el el protector de Buruaga, que no es otro que José María Aznar.
El proyecto pertenece a Secuoya, la productora en la que está como socio y alto ejecutivo Jorge Sánchez Gallo, antiguo director de TVE con Aznar en el Gobierno e íntimo amigo y socio Buruaga y de Álvaro Pérez 'el Bigotes', uno de los procesados por la trama Gürtel.
Sáenz de Buruaga se había comprometido con TVE a no tirar de colaboradores que ya estuvieran en otros programas de los canales públicos, pero una vez más los compromisos han sido violados. Por si fuera poco, Twitter estalló tras la primera emisión por considerar que el formato es antiguo, facilón y caro.
Las paredes de todos los centros de RTVE aparecen empapeladas con los pasquines sindicales que denuncian con palabras muy gruesas la “generosidad” que muestra la actual dirección de RTVE con el que es considerado el periodista de cámara del expresidente Aznar.
El programa televisivo de Ernesto Sáenz de Buruaga Así de claro –que produce Pulso, la filial de Secuoya y por cuyas 27 entregas la cadena pública desembolsará la friolera de 2,1 millones de euros– paga a sus tertulianos 500 euros por cada sesión a la que acuden, exactamente 4,5 veces más que lo que cobran cuando van a programas producidos por la propia Televisión Española o Radio Nacional de España.