Carmena se encuentra privatizado... hasta el servicio interno de averías informáticas

El programa electoral de Manuela Carmena, actual alcaldesa de Madrid, prometía "fijar una estrategia para la recuperación progresiva de la gestión pública de los servicios municipales externalizados a grandes empresas y grupos económicos". Una clara declaración de intenciones que ha tenido algún que otro lapsus: la cesión en agosto de la gestión de un polideportivo municipal a una empresa privada, Carpa Servicios y Conservación. A pesar de ello, el nuevo equipo de Carmena continúa con su radiografía de los servicios que están privatizados para analizar si se pueden recuperar. Como ejemplo más claro, la 'remunicipalización' de la funeraria, que se hará efectiva en 2016. En esta labor de auditoría, Carmena se está llevando muchas sorpresas. La última, descubrir que hasta el servicio interno que usan todos los funcionarios del Ayuntamiento para comunicar una incidencia informática está privatizado.

Se trata del SICAM, el centro de Soporte a la Informática y a las Comunicaciones del Ayuntamiento de Madrid. ¿Qué hace este servicio? Por ejemplo, un trabajador municipal que regresa de vacaciones y ha olvidado su contraseña para entrar en su ordenador. Debe llamar al SICAM (al número 33033, un teléfono interno) para comunicar su incidencia y que se la solucionen, un servicio que cuesta a las arcas públicas 1,89 millones al año porque está privatizado desde 2008, durante el segundo mandato de Alberto Ruiz-Gallardón. Un detallado informe redactado por los sindicatos asegura que recuperar este servicio, es decir, gestionarlo desde el propio Ayuntamiento, ahorraría a la ciudad 1,31 millones de euros.

Los sindicatos calculan que recuperar este servicio privatizado ahorraría a las arcas públicas 1,3 millones cada año

El SICAM fue adjudicado a la empresa Fujitsu Technology Solutiones en marzo de 2008. Según el citado informe el centro de soporte, privatizado, tiene actualmente 14 trabajadores. Los sindicatos creen que el servicio necesita 21 empleados, cuyo salarios sumarían 544.000 euros anuales si fueran empleados municipales. Su formación a cargo del Ayuntamiento costaría otros 31.440 euros, lo que hace un total de 575.500 euros al año si el SICAM fuera 100% municipal, 1,3 millones menos de lo que cuesta ahora estando en manos privadas. Según datos internos a los que ha tenido acceso El Confidencial, los trabajadores municipales suelen comunicar cada año una media de 105.000 incidencias informáticas, de las que el 28% son problemas con las claves de acceso a Intranet municipal, otro 28% son problemas de "software y hardware", y un 5% son problemas de telefonía.

CSI-F aboga por recuperar servicios privatizados

"El planteamiento para la prestación de los servicios ha sufrido un drástico cambio en los últimos años, pasando de un servicio integral a una mera prestación de trabajos o tareas. Este concepto se puede observar en la elevada contratación externa", denuncia CSI-F, que aboga porque este servicio y muchos otros que se prestan en Informática Ayuntamiento de Madrid (IAM), la agencia informática del Consistorio, vuelvan a ser municipales.

Sobre todo teniendo en cuenta que el recorrido que hace una incidencia muchas veces acaba en el propio IAM, es decir, problemas técnicos que comunican funcionarios pero que deben ser solucionados por funcionarios pero con el paso intermedio de una empresa privada. "Al principio el centro de soporte solo anotaba incidencias, ahora ya solucionan algunos de los problemas, básicos eso sí, como resetear una contraseña", explican fuentes del IAM, que actualmente cuenta con una plantilla de 511 trabajadores, 128 de ellos funcionarios y 383 personal laboral. La plantilla del Ayuntamiento es de 25.400 efectivos.

El primer contrato se adjudicó en marzo de 2008 por un importe de 4,46 millones de euros. Era un contrato bianual prorrogable, por lo que el Ayuntamiento pagó 2,22 millones cada ejercicio hasta el año 2012. Ese año se volvió a adjudicar el concurso a Fujitsu por 3,78 millones bianuales, 1,89 cada ejercicio. Desde 2008, el Ayuntamiento ha pagado en torno a 14,5 millones por este servicio.