El 'community estrella' de Iberdrola tira de vips y chequera para colar sus mensajes

A Carlos Fernández Guerra, el hombre que está detrás de la cuenta de Twitter de Iberdrola, se le ha visto demasiado el plumero en su último intento por posicionar a la compañía entre las empresas que más están a la vanguardia contra el cambio climático. A golpe de pedal y de chequera, este 'community manager' de reconocido prestigio en la red ha tenido que tirar de viejos métodos publicitarios para colocar sus mensajes verdes entre el gran público. La jugada no ha pasado desapercibida y le está ocasionando ya las primeras críticas entre quienes hasta ahora siempre habían alabado su trabajo.

Y es que las cosas ya no le salen tan rodadas ahora como cuando estaba en la Policía. Hay que recordar que Carlos Fernández fue el ‘community manager’ que logró que el Cuerpo Nacional de Policía se situase como la fuerza de seguridad con más seguidores en Twitter del mundo. Un currículo brillante que le llevó, en agosto, a dar el salto a la empresa privada de la mano de su sorprendente fichaje por la compañía de Ignacio Sánchez Galán con sede en Bilbao.

Pues bien, la cuestión es que, con motivo de la última Cumbre del Clima de París, una delegación de 10 especialistas de Iberdrola recorrió en bicicleta la distancia que separa Bilbao de la capital francesa (1.200 kilómetros) para concienciar acerca del cambio climático y dar a conocer el compromiso de Iberdrola de reducir su intensidad de emisiones de CO2 en un 50% en 2030 con respecto a los niveles de 2007 y ser neutra en carbono en 2050.

El ‘tour’ verde de Ibedrola se presentaba así como una excusa perfecta para que Carlos Fernández pudiera dinamizar la cuenta de Twitter de la compañía y posicionar a la marca en medio del debate sobre contaminación y calentamiento global que tanto debate ha generado en las últimas semanas, ya sea por los compromisos y la reunión de París o por los altos niveles de polución que han tenido a Madrid bajo una espesa boina de contaminación durante los últimos días.

Lo que pasa es que, como decíamos, no es lo mismo trabajar para las fuerzas de seguridad del Estado, cuyos méritos en pro del bien común son fácilmente vendibles a través de las redes sociales, que para una compañía eléctrica. Y claro, las dificultades que está arrostrando el propio ‘community manager’ para seguir brillando con luz propia en el universo digital son mucho mayores. De ahí que haya tenido que recurrir a otros ‘influencers’ de la red, previo pago, para que le den bola a su iniciativa y consigan dar más relevancia a los mensajes de Iberdrola.

Para ello, Fernández ha iniciado una campaña a través de la empresa SocialPubli para pagar a estos personajes vip sus menciones a Iberdrola, tal y como ya han destacado algunos medios especializados. La comprobación es bien sencilla. Si se pincha en los enlaces bit.ly publicados por estos ‘influencers’, se observa que el enlace pasa a través de SocialPubli y, con ello, el citado personaje vip recibe una comisión por la ayuda prestada. Métodos que están a la orden del día en otras tantas campañas de internet pero que no eran necesarias cuando se hablaba de la Policía y que, por tanto, están sirviendo para emborronar la impoluta hoja de servicios que Carlos Fernández acumulaba hasta la fecha. Desde luego, la lupa de las redes sociales ya ha tomado nota.