“Utilizan la calidad del aire como pretexto de sus motivos ideológicos. Manipulan por intereses políticos e ideológicos”
El Gobierno de Ana Botella aprobó el protocolo con los cuatro escenarios aún vigentes y la restricción de coches en función de la terminación de su matrícula.
París cuenta también con un modelo similar al de la alternancia de matrículas, aunque incluye la gratuidad del transporte público. A partir del próximo 1 de enero, la alcaldesa Anne Hidalgo cerrará la ciudad a los vehículos pesados matriculados antes de marzo de 2001 y a todos los automóviles anteriores a 1996.
Otras ciudades por medidas alternativas. En febrero de 2003, el entonces alcalde laborista de Londres, Ken Livingstone, aprobó un peaje para en centro de la capital inglesa. Los londinenses pagan desde entonces 11,5 libras al día de lunes a viernes si deciden circular por la Congestion Charge Zone. Su sucesor en el cargo, el conservador Boris Johnson, aplazó el plan ULEZ (Ultra Low Emissions Zone) hasta septiembre de 2020, cuando los vehículos deberán someterse a exhaustivos estándares de emisiones. La nueva normativa vigilará con cámaras los coches, motos y buses que circulen por el centro de Londres y reserva sanciones que alcanzan las mil libras en caso de incumplir con los requisitos recogidos.
En Los Ángeles, donde se vivieron graves episodios de contaminación atmosférica en la década de los setenta, llegó a restringirse el acceso de los niños al patio en días de mayor riesgo. El propio presidente republicano Richard Nixon llegó a declarar que el medioambiente no era una cuestión ideológica cuando anunció sus planes antipolución. Un estudio publicado el año pasado por la universidad de Southern California descubrió que los niños de la región respiraban mejor que en 1994