La política española en cinco tipos del Carnaval de Cádiz

Entre las muchas peculiaridades, el Carnaval de Cádiz tiene un lenguaje propio. Y en el epicentro mismo de esa jerga carnavalesca, hay una palabra: el tipo.

¿El tipo es el disfraz? No exactamente. El tipo es lo primero y lo último de cada agrupación, ya sean cuartetos, chirigotas, comparsas o coros. El tipo es el alma y la estética, la forma y el fondo. En el Carnaval de este año se ha podido recorrer la actualidad política en cinco tipos que, a su vez, son algunas de las agrupaciones que han actuado con más éxito sobre las tablas del Teatro Falla. Ante la semana decisiva del Carnaval de Cádiz, que se ha cerrado con la final de este viernes, estos son los cinco tipos más celebrados en el repaso de la convulsa actualidad política española con el sarcasmo, el arte y la gracia propias de los gaditanos.

1.- ‘La pela es la pela’, la parodia catalana

La deriva independentista catalana ha merecido en otras ocasiones la atención de las agrupaciones del Carnaval de Cádiz, pero la diferencia en esta ocasión es que se le ha dedicado una chirigota entera, un repertorio entero. Tipo independentista. Para empezar, toman el lema más popular de Cádiz, aquel que Antonio Burgos le sopló a Jesús Quintero en su pregón, y se lo trasladan a la realidad catalana, como una explicación del porqué independentista: “No preguntes más, Cataluña es diferente y allí hay que mamar”. Es una chirigota de Puerto Real que ha diseñado el escenario para su actuación con los tópicos del cava y la butifarra, la estelada y las imágenes santificadas de Artur Mas y Jordi Pujol.

2.- 'Los niños de la Susana', en esplendor

La presidenta andaluza es una seguidora fiel del Carnaval de Cádiz y este año, que le han dedicado una agrupación, lo ha acogido con agrado porque piensa que no se han ensañado con ella. Acaso se esperaba críticas más ácidas. Esta chirigota nace en el mismo año que su primer hijo y por eso se llaman así, “Los niños de la Susana”, para hacer más fácil la rima entre el apellido, el populismo y la región. Susana Díaz rima con Andalucía, que es su guardería. Más o menos. Cada provincia andaluza es uno de los niños de la guardería a la que acude la presidenta. Lo mejor de todo es que es de las pocas agrupaciones que se ha atrevido a censurar abiertamente a la Junta de Andalucía, algo que se suele soslayar para evitar censuras del siempre poderoso régimen socialista andaluz.

3.- 'Si me pongo pesao, me lo dices'

La siempre esperada chirigota de uno de los clásicos del Carnaval de Cádiz, José Luis García Cossío, se convirtió en viral a partir de un parecido razonable entre el original tipo de esta chirigota y una escena congresual entre Pedro Sánchez y Alfredo Pérez Rubalcaba. Y no en vano, ha sido la ganadora. Juan, cabizbajo y triste, con la nariz respingona y la nariz prominente, es un calco inesperado de Rubalcaba, aunque nada tenga que ver la chirigota con la trastienda del Partido Socialista. En el repertorio, se mezcla la crítica política con un divertido repaso de la realidad social de la crisis. Como dicen al principio, “para cortarse las venas con el cristal de la urna”.

4.- ‘Salimos del Euro’, Cataluña y corrupción

El nombre de este coro es equívoco, porque no se trata de ninguna salida a la griega. En realidad, la puesta en escena de este coro es, en sí misma, una idea válida para una película surrealista. Los participantes de Eurovisión permanecen vivos, juntos, intactos, en una ciudad alejada del tiempo y del espacio. Los componentes de este coro recorren todos los tiempos con muchos tipos reconocibles, desde Augusto Algeró, que tiene la batuta, hasta Abba, Betty Missiego, Massiel, Salomé, Remedios Amaya, Rosa con Bisbal y Bustamante, Mocedades, Micky, Peret o el Chikilicuatre. Para todos ellos hay referencias en algún momento, pero parece que de todas las actuaciones de España en Eurovisión la canción más actual es la que interpretó Remedios Amaya que fue, precisamente, uno de los mayores desastres eurovisivos: “¿Ay, quién coño maneja la barca de esta España que anda sin patrón?” Las críticas más ácidas, en cualquier caso, son para el independentismo catalán.

5.- ‘Los Kichis’, la chirigota a medida del alcalde

El alcalde de Cádiz, José María González, Kichi, era un fervoroso seguidor del Carnaval de su ciudad, además de un activo participante, que había completado todos los ciclos carnavaleros menos uno: ser protagonista de las letras de las comparsas, coros y chirigotas. Eso ya lo ha conseguido este año con creces; hasta le han dedicado una chirigota: 'Los Kichis'. Una chirigota amable, militante, de alabanza y bienvenida, lo contrario que el trato ácido y grotesco que todavía le dispensan las agrupaciones a Teófila Martínez, la alcaldesa del PP durante dos décadas. La puesta en escena es propia de Podemos, dos pancartas y mucha coleta: “No a los recortes… del flequillo del Kichi”. Aunque esa misma estrofa la podría suscribir con más propiedad el president de la Generalitat.