Es noticia
A la inversa
  1. España
  2. Mirada Ciudadana
Begoña Villacís

Mirada Ciudadana

Por

A la inversa

Tiempo les ha faltado para sacar el comodín de la subida de impuestos aderezado con una subida de cuotas encubiertas para los autónomos

Foto: Rajoy en un acto del Partido Popular en Córdoba. (Efe)
Rajoy en un acto del Partido Popular en Córdoba. (Efe)

Recuerdo que hubo una época en la que se comentaba en mi colegio que si uno cogía determinada canción y la escuchaba al revés se revelaba el verdadero mensaje de aquella melodía. El caso es que probabas y los fonemas estaban ahí, del resto se encargaba tu imaginación. Estaba todo pensado.

Creo que el método “inverso” es perfectamente aplicable a los programas electorales que sucesivamente trata de colarnos el Partido Popular. La secuencia es la siguiente: presento una simbólica rebaja señuelo justo antes de la cita electoral, maquillo un poco las cifras de déficit por el qué dirán, lamentando acto seguido la inoportuna honestidad europea, que tiende a demostrarnos una y otra vez que la policía no es tonta... Y a partir de ahí, campo abierto para garantizar a todos los españoles que esta vez es distinta, que esta vez sí, sí, sí van a bajar los impuestos a la clase media y trabajadora. Error. Y es que si algo tienen los reincidentes, es que reinciden. El programa del Partido Popular sólo es creíble si uno le invierte el sentido a las promesas, porque generalmente, después de elegidos, se olvidan de lo prometido.

El programa del PP sólo es creíble si uno le invierte el sentido a las promesas, porque generalmente, después de elegidos, se olvidan de lo prometido

Estas primeras semanas de andadura parlamentaria han dejado buenas pruebas de ello. Han demostrado que las autopistas en España se adjudican a beneficio de inventario, y que si la empresa no gana, o incluso le da por perder, siempre se opta porque sean otros los avalistas estafados. Concretamente los ciudadanos.

Tiempo les ha faltado para sacar el comodín de la subida de impuestos aderezado con una subida de cuotas encubiertas para los autónomos. Se ve que han advertido que esto de contraprogramarse no les pasa demasiada factura y además han encontrado al socio perfecto para tales menesteres. Al fin y al cabo, el PP y el PSOE llevan realizando la misma política tributaria desde hace años, el pacto actual es simplemente un ejemplo de honestidad histórica, la de escoger siempre la solución más fácil.

El Gobierno sí puede permitirse que no le salgan los números, sólo tiene que darle al desgastado botón de “recaudar más ingresos”

Al fin y al cabo, la gestión de “lo público” tiene sus ventajas, para empezar, la viabilidad está garantizada, lo que evita esa molesta lucha diaria que entretiene a tantas empresas en este país, entre la extinción y la supervivencia. Los términos despido, reducción salarial, expediente de regulación de empleo, concurso de acreedores, empiezan puertas afuera, y la considerable red de chiringuitos políticos y nidos de afines varios apenas han advertido el transcurrir de una de las crisis más severas por las que ha atravesado este país.

Por último, a diferencia de las familias españolas, a quienes les ha salido un dependiente más llamado Estado, el Gobierno sí puede permitirse que no le salgan los números, sólo tiene que darle al desgastado botón de “recaudar más ingresos”, aunque eso implique exprimir un poco más a quienes sí saben lo que es una crisis, lo que es un despido, lo que es un expediente de regulación de empleo y un concurso de acreedores en el que, cómo no, el estado es siempre acreedor preferente.

Recuerdo que hubo una época en la que se comentaba en mi colegio que si uno cogía determinada canción y la escuchaba al revés se revelaba el verdadero mensaje de aquella melodía. El caso es que probabas y los fonemas estaban ahí, del resto se encargaba tu imaginación. Estaba todo pensado.