Palo Alto
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Cádiz, la última y peligrosa etapa del Rey
Ha puesto encima del enorme y emergente mantel iberoamericano todo el bagaje acumulado de prestigio y reputación a nivel personal del que es capaz el rey
Ha puesto encima del enorme y emergente mantel iberoamericano todo el bagaje acumulado de prestigio y reputación a nivel personal del que es capaz el rey Juan Carlos para que los veintidós Jefes de Estado y de Gobierno que conforman la Cumbre Iberoamericana (XII) le acompañen durante los próximos 16 y 17 en la inmortal y muy liberal Cádiz.
Que con tipejos como Hugo Chávez y la Fernández nunca se sabe; son tan imprevisibles (y peligrosos) como la prima de riesgo o las admoniciones de doña Angela Merkel.
Porque es en estas cumbres donde el Rey (“ por qué no te callas”) se siente más a gusto consigo mismo y percibe que la Corona tiene todavía algún sentido en esa especie de “commonwealth” a la hispana que se celebra cada doce meses.
Consciente de que “dan ganas de llorar”, no acepta y se encorajina que al final de su largo reinado –cuando ya aparece como un hombre al que le cuesta caminar, él, el deportista nato de antaño- se ponga en cuestión los enormes “servicios prestados a la Patria” y todo aparezca manga por hombro, incluida su familia.
-¿Qué es lo que peor lleva SM? -pregunto a quién puede responderme.
-Envejecer… Le cuesta aceptar que ya no es lo que fue…
Y tiene suerte. Porque es el único que queda de la Transición y Mas le quiere quitar una parte de la corona, Cayo Lara la otra media y Ramoncín lo que resta.
¡Temblad ardillas de La Zarzuela!
Ha puesto encima del enorme y emergente mantel iberoamericano todo el bagaje acumulado de prestigio y reputación a nivel personal del que es capaz el rey Juan Carlos para que los veintidós Jefes de Estado y de Gobierno que conforman la Cumbre Iberoamericana (XII) le acompañen durante los próximos 16 y 17 en la inmortal y muy liberal Cádiz.