El honor y la hacienda de los Pujol en manos de la juez Mejías

Fuentes judiciales catalanas muy solventes señalan a este columnista que la jueza Silvia López Mejías, titular del juzgado de Instrucción número 9 de Barcelona, tiene ya en su poder el informe que la Guardia Civil ha hecho en relación con el caso ITV y que afecta de plano al único hijo de Jordi Pujol que se dedica a la vida política, Oriol, en calidad de secretario general de Convergencia Democrática de Cataluña (CDC).

Gentes que han leído dicho informe subrayan que, difícilmente, la jueza puede mirar hacia otro lado a la luz de las pesquisas realizadas por la Benemérita en relación con la intermediación directa del número dos de CDC para que su socio no pague Hacienda.

Dicha jueza forma parte de la Asociación Profesional de la Magistratura y tiene fama de rigurosa y estricta. Una mala noticia para el hereu, que no tiene otro remedio que  envolverse en la estelada para fabricarse enemigos exteriores y mimetizarse con Cataluña. Es decir, lo de siempre. Por eso necesitan tener su propia agencia tributaria y su propio sistema de justicia.

Los datos que se conocen al respecto de la utilización del poder político para el business por parte de quien fuera el virrey catalán no dejan lugar a dudas. Recuerdo a tal respecto que una vez don Jordi, en ese momento Molt Honorable en ejercicio, se quejaba de que los del PP hicieran cuestión de gabinete que sus siete hijos se ganaran la vida presentando su apellido por doquier.

El equipo que acompaña a Oriol en la trama es políticamente separatista, pero no hace ascos a hacer negocios en toda España, ya sea con “ITV para chimeneas” a través de TÜv Rheinland o con cualquier otro business de otro sector aunque tuviera el celofán de la enseña nacional.