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El bochorno Blesa y sus cuates: ¡Tira de la manta, Pedro!
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Graciano Palomo

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El bochorno Blesa y sus cuates: ¡Tira de la manta, Pedro!

La Audiencia Provincial de Madrid, a través de la ponente María Pilar Oliván Lacasta, junto con los magistrados Rosa María Quintana San Martïn e Ignacio José

Foto: El bochorno Blesa y sus cuates: ¡Tira de la manta, Pedro!
El bochorno Blesa y sus cuates: ¡Tira de la manta, Pedro!

La Audiencia Provincial de Madrid, a través de la ponente María Pilar Oliván Lacasta, junto con los magistrados Rosa María Quintana San Martïn e Ignacio José Fernández Soto, se han mofado del juez Elpidio José Silva de una manera tan injusta como innecesaria.

Ignoro cómo acabará finalmente este asunto del “caso Blesa”, pero de algo estoy completamente cierto: este juez tan atrabiliario y original (incluso para ser el número uno de su acceso oposición a la carrera judicial, cosa que no se puede afirmar de ninguno de sus tres compañeros que se han reído de él) no ha dejado un agujero de 23.000 millones de euros en Bankia, descuadre que puso a España contra las cuerdas y mirando a Coria a todo el sistema financiero de este país, amén de haber arruinado (literal) a más de trescientas mil personas modestas que confiaron en quien no debían. Punto.

Esta es la verdad. Y la verdad es siempre la verdad.

Sin embargo, de Miguel Blesa sí que lo sabemos todo o casi. Y sabremos más de sus andanzas al frente de la que fue segunda caja de ahorros del país. Sabemos, por ejemplo, que como inspector fiscal nunca (salvo trinques) hubiera podido subirse a un BMW de 500.000 euros (aunque le parecía un coche incómodo), ni coquetear con lo más granado de la élite financiera y empresarial de España, y mucho menos hacerse rico y convocar a sus consejos de administración en paraísos de turismo sexual (sé de lo que escribo, perdonen), bla, bla, bla y etcétera, etcétera, etcétera.

Y encima sale envalentonado de la cárcel diciendo que no se arrepiente de nada. ¡Nunca vi por estos lares una jeta tan demacrada como la de este amiguísimo de Aznar al que le debe todo! ¿O no? ¿Quizá sea José María Aznar quien le debe a él? Pues investíguese. El dinero no aparecerá pero al menos nos divertiremos.

El juez Silva tiene los nombres -de dentro del CGPJ, de fuera y del más allá- de los que le han presionado hasta el paroxismo en este feo asunto. Le pido que los dé a conocer y explique con pelos y señales el intolerable comportamiento de los distintos poderes que se han movilizado -¿qué temen?- para salvar a un sujeto inexportable como Miguel Blesa.

Por de pronto, el señor Goirigolzarri debería sacar a la luz la última acta del consejo de administración de Cajamadrid que presidió Blesa antes de ser arrojado por la ventana. ¡Ahí tendríamos algunas respuestas! ¿De qué? De quien o quienes recibieron créditos por doquier que nunca han devuelto.Y también, y de paso, porque ahora Bankia es una banca pública salvada con el dinero incluso de los estafados por las preferentes, y no debe haber zonas de opacidad. Si tienen que caer sindicalistas -¡ojo!-, dirigentes de partidos de izquierda y del PP pues que la guillotina se afile.

Hasta ahora la única guillotina en forma de oprobio que ha caído ha sido sobre la cabeza del juez Silva. No sólo en forma de auto por sus coleguillas antes citados. Sólo hay que oir determinadas emisiones radiofónicas (¿Blesa les dió algún dinero?) o leer determinados comentarios impresos.

Lo dicho: Blesa tiene el poder; Silva la razón...y al pueblo. ¡Claro, que este no cotiza en la bolsa de los intereses!

La Audiencia Provincial de Madrid, a través de la ponente María Pilar Oliván Lacasta, junto con los magistrados Rosa María Quintana San Martïn e Ignacio José Fernández Soto, se han mofado del juez Elpidio José Silva de una manera tan injusta como innecesaria.