Es noticia
Rosalía toma el mando
  1. España
  2. Palo Alto
Graciano Palomo

Palo Alto

Por

Rosalía toma el mando

Comprendo que las mesnadas populares anden  enfurecidas, despistadas y atónitas. Incluso que muchos colegas no sepan ni por dónde sopla el aire en el caso Bárcenas,

Comprendo que las mesnadas populares anden  enfurecidas, despistadas y atónitas. Incluso que muchos colegas no sepan ni por dónde sopla el aire en el caso Bárcenas, aunque vayan a las tertulias a dar lanzada a moro muerto. Tras las Cuatro horas con Bárcenas, el ingreso en prisión del interfecto, el abandono de sus abogados, el quilombo de los recibís y la ofensiva de la izquierdona (que a punto está de convertir al corderito Luis, el cabrón en su peana particular), han pasado muchas cosas, y algunas particularmente importantes.

Por ejemplo, que tras la toma de huellas dactilares del extesorero quien asume el mando de las operaciones barcenísticas es Rosalía Iglesias, la exsecretaria del cuartel general de Génova 13, con la que se desposó un día  el nuevo multimillonario. Iglesias  fue ya hace meses la garganta profunda del columnista más reputado e incontestable del panorama patrio que organizó la de Dios es Cristo, que responde por la R. y la P. y que, para este modesto escribidor, es icono y referencia de tantas cosas.

Rosalía siempre fue partidaria de “tirar de la manta” (la ignorancia es muy atrevida) y, encorajinada porque su Luis no fuera el único pagano de la merdé, decidió de motu propio ir al asalto sin saber que Cospedal no tragaría y que el comandante en jefe es un personaje antes que nada impasible.

Los rumores (bien fundados) insisten en que Iglesias siempre fue partidaria de acudir al amparo de Pedro J. que, además, parece tener un notable ascendiente sobre el exjuez Javier Gómez de Liaño, cuya minuta como profesional de la cosa no es precisamente de pocos ceros. Esta es otra cuestión que tampoco es baladí. ¿Quién paga a Gómez de Liaño? ¿Pero no fue indultado por un Gobierno del PP? Apuesto doble contra sencillo: el próximo lunes Bárcenas volverá a negarlo todo. ¡Ya será demasiado tarde!

Comprendo que las mesnadas populares anden  enfurecidas, despistadas y atónitas. Incluso que muchos colegas no sepan ni por dónde sopla el aire en el caso Bárcenas, aunque vayan a las tertulias a dar lanzada a moro muerto. Tras las Cuatro horas con Bárcenas, el ingreso en prisión del interfecto, el abandono de sus abogados, el quilombo de los recibís y la ofensiva de la izquierdona (que a punto está de convertir al corderito Luis, el cabrón en su peana particular), han pasado muchas cosas, y algunas particularmente importantes.