Rubio es más importante para España que la pobre Forcadell

Mientras oía una disparatada entrevista en RNE a Carme Forcadell -estos muchachos del Medioevo tienen especial querencia por los medios públicos nacionales españoles- veía en televisión el debate entre los candidatos republicanos que optan a la Casa Blanca.

Entre ellos, Marco Rubio, que es más joven que la muchachita Forcadell. El senador por Florida sí sabe dónde está y por dónde se conduce el mundo moderno.

Marco milita en las filas del Partido Republicano pero es mucho más progresista y moderno que la señora que fue concejala en Sabadell y a la siguiente los vecinos de esa ciudad catalana la mandaron a paseo. Rubio sabe que lo que se estila hoy por el pequeño mundo son los vuelos grandes y lo más extensos posible. Forcadell quiere arrinconarse y chapotear en sus diminutos 27.000 kilómetros cuadrados que serán menos si el Val d'Aran, como tiene anunciado, decide irse de Cataluña, en el caso de que finalmente los secesionistas consigan sus propósitos.

A los jóvenes españoles (catalanes incluidos) les interesa más la figura y lo que pueda decir Rubio que los panfletos llenos de mugre que lee la señora Forcadell desde tribunas institucionales o su falta de conocimientos sobre todo; incluyendo la propia historia catalana y, por ende, española.

Así que decidí apagar el dial radiofónico y seguir viendo el debate a siete con políticos generalmente serios que opinan mayormente sobre cosas serias.