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Lo de Sánchez, mandíbula de acero
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Graciano Palomo

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Lo de Sánchez, mandíbula de acero

Hasta las 8:47 minutos del pasado jueves creí a pie juntillas que don Pedro lograría dormir en la Moncloa. Ahora lo veo más complicado. ¿Por qué? Porque a esa hora exacta hablé con Íñigo Errejón

Foto: Pedro Sánchez, el pasado día 2, en rueda de prensa en el Congreso. (EFE)
Pedro Sánchez, el pasado día 2, en rueda de prensa en el Congreso. (EFE)

El muchacho promete. Nunca he creído, como muchos, que fuera estulto de solemnidad. ¡A ver si resulta que ahora va a devenir en 'Yo Claudio'! Inexperto, sí. Errores, más. Ambición, toda.

Martu Garrote, una de las militantes del PSOE que no vive del partido (hasta que la expulsen) me informa de que cuando se produjo el relevo de Alfredo Pérez Rubalcaba y Susana Díaz decidió apostar por el madrileño, el químico, en su inmensa sabiduría, les advirtió: “No sabéis con quién os estáis jugando los puestos… Este tiene la mandíbula de acero”.

Resulta que al día siguiente, Sánchez dejó compuesta y sin novio a la lideresa andaluza al nombrar a César Luena como número dos en lugar de a Mario Jiménez, con el que Díaz acaba de firmar la paz después de la guerra fría que hasta el momento convivía entre ambos.

El resto de su corta andadura es bien conocida por todos. Dijo que Pablo Iglesias quería importar a España el modelo soviético y ahí le tienen, bailando un tango a dos manos. Dijo que lo de Rivera era cosa del Ibex y le fotografían bailando 'agarrao' con el “niño Jesús” de color naranja. Adjuró por sus muertos de la derecha y desde que fue mencionado por el Rey como gran estadista no hay minuto que no saque el botafumeiro para perfumar a los 7.216.530 votantes del PP, a los que manda su “respeto y consideración”.

Desengáñense los 'antiSánchez'. De tonto, nada. Hace tan sólo unas horas le mandó a Díaz un mensaje inequívoco con el membrete de Mariano Rajoy: la corrupción se limpia desde la oposición. ¿Estaba, quizá, pensando en los ERE andaluces y toda la retahíla de trinques por aquellos lares? Definitivamente, sí.
Sinceramente, hasta las 8:47 minutos del pasado jueves día 4 creí a pie juntillas que don Pedro lograría dormir en el palacio de la Moncloa. Ahora lo veo más complicado. ¿Por qué? Porque a esa hora exacta le pregunté a Íñigo Errejón, el gran estratega de la cosa en el cuartel general de la céntrica calle Princesa, 3, si había gato encerrado en sus caricias al jefe del PSOE. Sostengo que nadie en su sano juicio se lanza a una aventura de confetis y juegos de artificio si antes no sabe que en la poza hay agua.

-Tampoco le queda otro remedio -contestó el rey de los memes-. Está en una personal huida hacia adelante; o se corona con nosotros o termina con su cabeza en el cadalso…

Suficiente. Tampoco hace falta entrar en detalles. El resto de la historia está todavía por escribir. Pero no se detiene; va rápida.

El muchacho promete. Nunca he creído, como muchos, que fuera estulto de solemnidad. ¡A ver si resulta que ahora va a devenir en 'Yo Claudio'! Inexperto, sí. Errores, más. Ambición, toda.

Pedro Sánchez Susana Díaz Íñigo Errejón