Es noticia
Rivera reparte juego
  1. España
  2. Palo Alto
Graciano Palomo

Palo Alto

Por

Rivera reparte juego

Desde Ciudadanos llegan algunos destellos de turbación sobre ciertos fichajes que pueden salpicar a su líder de la misma forma que Soria lo ha hecho con Rajoy

Foto: El núcleo duro de Albert Rivera. (EFE)
El núcleo duro de Albert Rivera. (EFE)

Me llegan noticias inquietantes respecto a los codazos internos que empiezan a describirse en el intestino grueso de Ciudadanos. Natural. Aunque todavía no han tocado pelo se aprestan a ello porque no es muy comestible que los dirigentes naranjas sean en sí mismos espíritus puros que hayan dejado sus profesiones para salvar nuestra alma. Natural.

El empacho de Albert Rivera con que nos han agraciado desde que el antiguo empleado de La Caixa decidió con notable éxito dejar Barcelona para reinar en el vasto mundo hispano no podía continuar por mucho tiempo. Lo poco agrada; lo excesivo amarga. Eso sin reparar en otro dicho que pasa por describir aquello de quien mucho habla, mucho yerra.

De ahí que Rivera -algunos nombramientos terminarán por salpicar su reluciente cara como Soria y Torres Hurtado están haciendo con la de Rajoy- haya decidido repartir juego porque los delanteros centro necesitan siempre una línea medular que sude la camisola. Juan Carlos Girauta y Villegas son en paralelismo político lo que Modric y Kroos asistiendo a Cristiano. Todavía no ha aparecido el Bale de la situación porque para ese puesto presentan credenciales varios candidatos. Fernando de Páramo anda al acecho, según dicen, pero también afirman que es el responsable directo de la cooptación de nombres para cubrir puestos de consejeros políticos, por ejemplo, en Telemadrid con curriculums que no se compadecen ni con la frescura propia de esa formación ni con el talento que su comandante en jefe presume a diario entre sus gentes de confianza.

También me han dicho que la alicantina Marta Martín, segunda de Girauta en el Grupo Parlamentario, está que se sale, lo cual dará munición a mi amigo cántabro para reeditar su libro sobre “autoritarismo, chicas guapas y dinero”.

Rivera ha puesto una pica en Flandes aprovechando la situación de un cuitado Sánchez. Con 40 diputados y 3,5 millones de votos ha triturado la marginalidad política para sentarse en el palco. Ahora está por ver si su abrazo con el PSOE y los ósculos en los morros con Pedro le acreditan el próximo 26 de junio como una gran bisagra con los goznes engrasados.

Me llegan noticias inquietantes respecto a los codazos internos que empiezan a describirse en el intestino grueso de Ciudadanos. Natural. Aunque todavía no han tocado pelo se aprestan a ello porque no es muy comestible que los dirigentes naranjas sean en sí mismos espíritus puros que hayan dejado sus profesiones para salvar nuestra alma. Natural.

Ciudadanos Juan Carlos Girauta