Un escenario criminal

Me he tomado la molestia de tabular siquiera levemente los grandes retos a los que tendría que enfrentarse un próximo Gobierno español ya. Sin entrar en la letra pequeña, este sería el escenario diabólico.

En el interior: primera semana de septiembre. Destaca sobremanera y sobre cualquier otro asunto el desafío soberanista que supone la sedición en rebelión abierta al orden constitucional y democrático. El Tribunal Constitucional debe hacer frente a ese pulso suicida impulsado desde el propio Estado en Cataluña. Para el 20 de septiembre está anunciada la nueva ley de desconexión: la Hacienda catalana.

Para el 30 de septiembre tiene que haber proyecto de Presupuestos Generales so pena de una fuerte multa por parte de la Unión Europea. Esta vez no se andarán con gaitas.

En el escenario internacional, la situación se presenta ciertamente convulsa. En la primera semana de septiembre, elecciones en diversos estados alemanes con el auge de la extrema derecha y la cabeza de la canciller Merkel en almoneda. Amén de la escisión entre la CDU y su partido hermano de Baviera.

En el mes de octubre celebran en Italia un referéndum decisivo al que el primer ministro Renzi ha unido su suerte. En el mes de noviembre, elecciones presidenciales en Estados Unidos y Austria y referéndum en Hungría sobre la política europea en materia de emigración. Pintan bastos.

Y, dentro de unos meses en el 2017, elecciones legislativas en Alemania y Países Bajos y presidenciales en la todavía poderosa y determinante Francia.

¿Alguien da más? Y España sin Gobierno.