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Francia liquida el secesionismo catalán
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Graciano Palomo

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Francia liquida el secesionismo catalán

Según diplomáticos franceses, el 'Diplocat', ese invento equinoccial para gastar dinero de los contribuyentes, ha dejado de hacer 'lobby' y proselitismo entre los dirigentes galos

Foto: Un grupo de catalanes residentes en París reclaman la independencia a los pies de la Torre Eiffel. (EFE)
Un grupo de catalanes residentes en París reclaman la independencia a los pies de la Torre Eiffel. (EFE)

Llevan años persiguiendo ese objetivo: el apoyo de París a su causa independentista. Como un tema capital. Pero se han percatado ya de que Francia jamás apoyará la ruptura de la España constitucional, entre otras cosas, porque la segunda potencia europea está hasta el capirote de que también anden moviendo los braserillos absurdos en el sur de su nación.

De modo y manera que, según diplomáticos franceses, el 'Diplocat', ese invento equinoccial para gastar dinero de los contribuyentes (también del resto de los españoles), ha dejado de hacer 'lobby' y proselitismo entre los dirigentes galos.

Francia, como país vecino y gran potencia europea, era el oscuro objeto de deseo por parte de los independentistas. Ahora ese sueño salta por los aires. “Han dejado de dar la tabarra”, subrayan diplomáticos franceses acreditados en Madrid. Trataban de convencer a París de las bondades de una “república catalana” para Francia. Sería de risa y de desconocimiento brutal de la realidad mundial y europea de hoy si la cosa no fuera tan desleal e incluso traidora.

Foto: Un ciclista porta una 'estelada' en una manifestación celebrada en Lleida. (EFE)

Hay que recordar que a finales del 2013 el entonces presidente de la Generalitat remitió al presidente François Hollande una misiva reclamando apoyo para el “derecho a decidir” que el inquilino del Elíseo mandó directamente a la papelera. Luego, lo intentaron también con el primer ministro Manuel Valls, de origen catalán. Los mandó a paseo y puso definitivamente el gorro a los intentos de desestabilización de la democracia española. Hace unos días estuvo con sus hijos en Madrid y también se le pudo escuchar en privado acerca de la “locura independentista”. Hace unas horas, el propio Mas reconocía en la UAM que “hay otras alternativas a la independencia...”.

La guinda. El pasado lunes tuve ocasión de hablar con el embajador de Israel en España, Daniel Kutner, durante un encuentro en 'La brújula' de David del Cura. Cataluña siempre ha tenido a Israel como un icono y una gran relación comercial, entre otras cosas. Me dijo esto:

“Desde que se inició la deriva por parte de algunos dirigentes catalanes hacia el independentismo, Israel calla y no se inmiscuye en cuestiones internas...”.

Ahí lo dejo.

Llevan años persiguiendo ese objetivo: el apoyo de París a su causa independentista. Como un tema capital. Pero se han percatado ya de que Francia jamás apoyará la ruptura de la España constitucional, entre otras cosas, porque la segunda potencia europea está hasta el capirote de que también anden moviendo los braserillos absurdos en el sur de su nación.

Inquilino Catalán