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Cristina Cifuentes, año cero
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Graciano Palomo

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Cristina Cifuentes, año cero

La época de Aguirre deja paso al 'cifuentismo', una líder fogueada en la Delegación del Gobierno en Madrid y que conoce de primera mano el interior de una formación con ideologías diversas

Foto: La presidenta de la Comunidad de Madrid y del PP madrileño, Cristina Cifuentes. (EFE)
La presidenta de la Comunidad de Madrid y del PP madrileño, Cristina Cifuentes. (EFE)

Este mismo fin de semana se produce el entierro definitivo del 'aguirrismo' tras muchos años de poder e identidades propias. Echa a andar el 'cifuentismo' en uno de los territorios claves para el centro derecha en España.

Cristina Cifuentes, arropada por todo el estado mayor nacional del PP, no es una dirigente que llega ahora o surja por generación espontánea. Se fogueó en la Delegación del Gobierno en Madrid y conoce de primera mano las entretelas de una formación complicada donde se mezclan ideologías diversas, ambiciones paralelas y objetivos distintos.

Foto: Cristina Cifuentes, en su despacho en la Comunidad de Madrid. Foto: Ernesto Torrico

Un alto dirigente de Génova 13 me decía en días pasados que quizá lo que más distingue a la presidenta de la Comunidad de Madrid de otros conmilitones es leer con una cierta precisión el tiempo que corre y que toca correr. A tal respecto, cuando oigo y leo epitetar a dirigentes como Cristina Cifuentes de 'conservadores', me parece a mi que los que realizan esos ejercicios se han quedado anclados en el siglo pasado como poco. Porque, insisto, una cosa es militar en un partido u organización de izquierdas y otra bien distinta ser 'progresista'... Es la perversión del lenguaje, los conceptos y las ideas. O como dejó escrito aquel de la esvástica: "una mentira repetida mil veces se convierte en verdad".

Ser progresista es crear empleo, riqueza y luego repartirla con equidad. Punto. No veo a Cifuentes encasillada en un búnker sin ventanas

Si hubiera un polígrafo que diera cabal idea acerca del progresismo o conservadurismo de actuales mandatarios políticos españoles nos llevaríamos sorpresas enormes. Ser progresista hoy es, fundamentalmente, crear empleo, riqueza y luego repartirla con equidad y sentido del mérito. Punto. No veo a CC encasillada en el anaquel del conservadurismo decimonónico ni en ningún búnker sin ventanas.

Tengo para mí que, si es capaz de torear al natural y justeza con el “liberalismo” de Nacho Aguado y Begoña Villacís, la nueva lideresa madrileña podría presentar cartas credenciales en pocos años ante lo que inevitable llegará.

Nota a pié de página: Cristina regresó del más allá. Eso siempre es un valor añadido para relativizar cualquier actividad en este corta vida. ¿Me entienden?

Este mismo fin de semana se produce el entierro definitivo del 'aguirrismo' tras muchos años de poder e identidades propias. Echa a andar el 'cifuentismo' en uno de los territorios claves para el centro derecha en España.

Cristina Cifuentes