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El “nuevo comienzo” de Juncker o la naturaleza del escorpión
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El “nuevo comienzo” de Juncker o la naturaleza del escorpión

En la medianoche de Halloween, Jean-Claude Juncker enviaba este recoleto mensaje a sus nuevos comisarios:  “@MargSchinas: President @JunckerEU addresses message to all @EU_Commission staff. #TeamJunckerEU pic.twitter.com/TcO6gX8s5r”— Beatriz

En la medianoche de Halloween, Jean-Claude Juncker enviaba este recoleto mensaje a sus nuevos comisarios:

@MargSchinas: President @JunckerEU addresses message to all @EU_Commission staff. #TeamJunckerEU pic.twitter.com/TcO6gX8s5r

“Queridos colegas:

Hoy es el primer día de la nueva Comisión, y me siento honrado y orgulloso de que tomemos posesión. Los desafíos de Europa no van a esperar ni a que deshagamos las maletas.

Sois el corazón y el alma de nuestra institución y voy a contar con vosotros, con vuestra experiencia y profesionalidad, durante los próximos cinco años, para dar a Europa el nuevo comienzo que los ciudadanos esperan de nosotros.

Ahora ¡a trabajar!”

El martes 4, Juncker comparecía, seguro y ufano, ante la Conferencia de Presidentes del Parlamento Europeo. Otra vez destacaba el lustroso cartel que luce en el edificio Barlaymont: Un nuevo comienzo para Europa. Entretanto, al día siguiente, varios eurodiputados recelosos, a iniciativa de Dennis de Jong, le instábamos por escrito a revisar de nuevo el código de conducta e incluir mayores estándares éticos, y a explicar cómo y dónde iba a poner el freno para que los comisarios salientes no se vean envueltos en nuevos escándalos de las conocidas como "puertas giratorias", con un comité ético plenamente profesional e independiente. Yo le pregunté también cómo iba a conseguir legislar un mercado digital único europeo y reforzar el derecho a la protección de datos en seis meses, tal y como había prometido.

Pero fue el jueves 6 cuando a Juncker le explotó la bomba LuxLeaks en plena semana de lanzamiento: la herencia de su gestión como primer ministro al frente del por todos conocido paraíso elusor de impuestos. Miles de millones de impuestos escamoteados a los países miembros, gracias a sofisticados diseños de arquitectura fiscal personalizada.Nada cambia si uno no cambia. Es de locos esperar resultados distintos si se hacen las mismas cosas.

Como ha manifestado Maite Pagazaurtundua, "con una crisis que azota a millones de europeos y multiplica la desigualdad social a cuotas nunca vistas, es intolerable que las grandes empresas se escaqueen de pagar sus impuestos y, encima, haya Estados dispuestos a darles cobertura".Esa es la cuestión. Son estas prácticas obscenas que el bipartidismo blindado pretende perpetuar las que propician el auge de los populismos que asolan Europa. Son la corrupción y las políticas antisociales del bipartidismo las que han pavimentado el camino para el discurso antisistema. No puede ser de otra manera: “Está en mi naturaleza”, respondería cualquiera de ellos, como el escorpión de la fábula, que prometió a la rana no picarla si le cruzaba el río...

A menos de una semana en el cargo, el descrédito que se abate sobre Juncker y su Comisión es devastador. Es un coste terrible para la maltrecha credibilidad instituciones europeas, que necesitan ponerse sin demora a acometer los graves problemas que acosan a los ciudadanos. “¿Para qué queremos Europa si Europa es esto? Si los que se denominan europeístas eligen para capitanear la nave a quien ha llevado a su máximo esplendor un paraíso fiscal, ¿cómo van a solucionar mis problemas?”, se preguntarán los millones de ciudadanos europeos desempleados, excluidos, saqueados…

Justificaciones legalistas acerca del “encaje europeo” del tax ruling luxemburgués no suponen sino un nuevo insulto. Llueve sobre mojado.
Socialdemócratas y liberales, los grupos que auparon a Juncker a la presidencia de la CE con el voto de la mayoría de sus miembros (no todos), manifestaron ayer su indignación y le exigieron comparecer urgentemente y rendir cuentas ante la Eurocámara. Pero quienes se entregaron sin reservas a apoyar esta nueva escenificación de los viejos repartos, disfrazándolo sin pudor de alto compromiso europeísta, deben dar explicaciones también.

*Beatriz Becerra Basterrechea es eurodiputada de UPyD.

En la medianoche de Halloween, Jean-Claude Juncker enviaba este recoleto mensaje a sus nuevos comisarios:

Parlamento Europeo Jean-Claude Juncker