Se consolida la figura de suelo

La reacción alcista de los índices en la sesión de ayer no solo aleja el peligro inminente que se produce cuando se alcanzan niveles de soporte clave como los testados estos últimos días sino que, además, consolida la aparición de un suelo sobre la base de una estructura más compleja. Las dudas ahora pasan por el tipo de continuidad a la que nos veremos sometidos; asistiremos a una vuelta en V o, por el contrario, se producirá un proceso consolidativo?

En este gráfico se analiza la evolución del Eurostoxx50 contado en base diaria. En la sesión de ayer se produjo una fortísima aceleración que logró recuperar todo lo perdido en la sesión del viernes pasado. Si unimos las sesiones del lunes y del martes mentalmente, se llega a la conclusión de que la fusión de estos dos días forman un “hammer”.

Si bien este “approach” no es muy ortodoxo, no deja de ser cierto que la unión de los últimos cuatro días, fusionando las sesiones dos y tres, forman una estructura de suelo muy relevante, un “morning star” que no hace más que ratificar la importancia y fortaleza estructural de la zona de soporte situada en el entorno del 2.540.

Este tipo de estructuras suelen ser el preludio de un movimiento alcista agresivo puesto que surgen tras una trampa bajista sobre un soporte clave en la que, además, se ha producido una capitulación muy clara en la que muchos stops se han ejecutado, lo que deja espacio para nuevas compras.

Sin embargo, hay que ser conscientes de que la caída sufrida este último mes se ha llevado por delante zonas de resistencia importantes; la directriz alcista que se inició en junio y la media de 200 sesiones. La última vez que se produjo una trampa bajista (mediados de abril), la reacción fue espectacularmente alcista. Pero en esa ocasión no se produjo una ruptura de las estructuras tan potente. Por otro lado, el canal lateral bajista que se puede construir desde los máximos de finales de enero es inquietante puesto que muestra la posible construcción de un Hombro Cabeza Hombro. Pero este es otro tema que se verá más adelante.

Por ello, se debe seguir siendo precavido, sobre todo si el movimiento continúa en la sesión de hoy. En este sentido, la primera zona de resistencia relevante se encuentra entre el 2.630 (media de 200) y el 2.650 (canal alcista perforado y parte baja del hueco bajista abierto entre el 19 y el 20 de junio). En esta zona se debe hacer caja, al menos parcial, de los largos que se recomendaron abrir en el entorno de los 2.540.

En este gráfico se analiza la evolución del Ibex contado en base diaria. La reacción alcista ha sido similar a la de la media europea aunque no tan alcista. Y es que, si bien la fusión de las sesiones del lunes y del martes forman un “hammer”, la sesión de ayer no logró alcanzar los máximos de la sesión del viernes.

En cualquier caso, la situación es similar. El anterior ataque a la zona de soporte principal estructural (entorno del 7.500) del mes de abril hizo menos daño a la estructura global que el ataque actual. Por ello, no debería producirse una reacción tan fulgurante como en esa ocasión. La parte baja del hueco bajista abierto la semana pasada (8.014) que viene a coincidir con el último mínimo decreciente del proceso bajista del último mes y medio (7.958) debería limitar las alzas por el momento. SI se superase esta zona, lo máximo a lo que se podría llegar antes de que saliese papel sería la zona comprendida entre 8.150 y 8.200.

Por lo tanto, los largos que se recomendaron abrir entre el 7.650 y el 7.500 deben cerrarse parcialmente si se alcanza hoy la zona comprendida entre el 7.950 y el 8.000, cerrándolos de manera completa en el caso de que se alcance la siguiente zona de resistencia comentada.

Por último, en este gráfico se analiza la evolución del Dax contado en base diaria. Al igual que el resto de “partenaires” europeos, la sesión de ayer alejó el índice desde la zona de soporte clave que había alcanzado a principios de semana (media de 200 sesiones). En este caso, la corrección, si bien ha sido muy profunda, no ha sido tan dañina puesto que no se ha roto ninguna estructura general de la tendencia alcista en la que se encuentra el índice desde hace tiempo, algo que también es lógico dado que se trata del índice que mejor comportamiento lleva teniendo en Europa.

Sin embargo, será clave su comportamiento en la zona comprendida entre el 8.000 y el 8.080. En esta zona se encontraba el último máximo creciente que quedó perforado la semana pasada y fue el detonante del desplome sufrido estos días atrás. En esta zona se encuentra también la media de 50 sesiones que estuvo ejerciendo de soporte hasta la semana pasada (por la Teoría de Dow debería invertir ahora su función) y la parte del hueco bajista que se quedo abierto la semana pasada. Es necesario superar esta zona de manera consistente para que el peligro bajista se disipe por completo.

Por ello, cualquier posición larga que se haya podido abrir niveles por debajo de los 7.700 puntos debe cerrarse, al menos parcialmente, entre el 8.000 y el 8.080. El resto de la posición debe mantenerse abierta a la espera de ver qué tipo de reacción tiene el índice sobre esta importante resistencia.