Es noticia
¿Playa o montaña? El mercado decide
  1. Mercados
  2. Análisis Técnico
Yosi Truzman

Análisis Técnico

Por
Yosi Truzman

¿Playa o montaña? El mercado decide

Los índices terminaron el viernes formando una gran vela bajista. El comportamiento de esta semana será clave para el devenir inmediato de las bolsas

No es la primera vez, desde que se logró superar la zona de resistencia estructural allá por los meses de septiembre y octubre, que los índices europeos terminan una semana formando una gran vela bajista. En todas las ocasiones, las caídas no tuvieron continuidad ya que los índices lograron darse la vuelta rápidamente. Por ello, el comportamiento de esta semana será determinante para el devenir más inmediato del conjunto de las bolsas.

En este gráfico se analiza la evolución del Eurostoxx300 contado en base semanal desde enero de 2011. Lo primero que hay que destacar es el comportamiento de este índice desde que logró superar la resistencia estructural de largo plazo situada entre 291,77 y 297,73.

Lo primero que se aprecia es que la parte alta del canal que se puede construir desde junio de 2012 ha servido de resistencia en todas las ocasiones. De hecho, cada vez que se ha alcanzado el canal, se han producido abruptas correcciones que han logrado perforar la media de 13 semanas (equivalente a una media de 3 meses). Sin embargo, en todas las ocasiones, el índice ha sido capaz de darse la vuelta a la semana siguiente, volviendo a recuperar la media móvil perforada. Además, ninguna de estas correcciones ha logrado perforar el mínimo creciente precedente.

En esta ocasión, la situación es ligeramente diferente. En primer lugar, la corrección experimentada la semana pasada no solo se inicia desde la parte alta del mencionado canal sino, también, tras el intento fallido de superar una de las resistencias estructurales más importantes, el mínimo de Kerviel, que, además, coincide con el 61,8% de todo el proceso bajista 2007/2009. Por otro lado, es la primera vez que la vela bajista viene precedida de un movimiento preparatorio; es decir, en todas las correcciones anteriores, el índice pasó de subir a bajar sin un aviso previo. En esta ocasión, hemos asistido a una lenta caída a la media que tras el intento fallido de recuperación, se ha terminado por romper.

A pesar de lo comentado, hay que tener presente que, por el momento, no se ha perforado ninguno de los mínimos crecientes relevantes. El de grado menor se encuentra en 317,88 (perforado solo en términos intradiarios) y el de grado mayor se encuentra en 313,79. Siempre que estos niveles no se pierdan, no tendremos señal bajista desde un punto de vista de la Teoría de Dow.

Por lo tanto, el comportamiento de este índice y del resto de índices europeos esta semana será determinante. Si logran darse la vuelta, tal y como viene ocurriendo con todas las correcciones aparecidas desde enero, la caída de la semana pasada será una mera corrección más con lo que podríamos asistir a un importante rebote durante el periodo de publicación de resultados. Por el contrario, si se pierden los soportes comentados, estaremos ante la primera señal seria de debilidad lo que abriría un escenario que podría llegar a la zona de soporte estructural siguiente situada entre los 300 y los 290 puntos.

En este gráfico se analiza la evolución del Ibex contado en base semanal desde mitad de 2009. Al igual que ocurre con la media europea analizada, el selectivo también formó una vela bajista de gran envergadura durante la semana pasada. Esta vela viene precedida del intento fallido de ruptura del punto de inicio del tramo bajista que se inició a principios de 2011 (11.165) y después de alcanzarse, prácticamente, la parte alta del canal que se puede construir desde junio de 2012. Por otro lado, cabe resaltar que la vela de la semana pasada ha logrado perforar en cierre la media de 13 semanas, algo que no ocurría desde mitad del mes de marzo.

A pesar de lo comentado, hay que tener presente que la estructura de máximos y mínimos crecientes sigue intacta. El índice demostró la semana pasada que hay interés comprador alrededor de los niveles de soporte alcanzados aunque no lo suficientemente ‘valiente’ como para asumir el riesgo del fin de semana (motivo por el cual no pudo aguantar probablemente las ganancias de cara al cierre del viernes). Adicionalmente, hay que resaltar que la línea de tendencia alcista que se puede construir desde el mínimo del movimiento que logró superar la resistencia clave estructural situada entre 9.776 y 9.820(mínimo de diciembre de 2013), sigue totalmente vigente.

Por lo tanto, la estrategia que se planteó la semana pasada sigue siendo totalmente válida. Entre el 10.500 y el 10.350 se debe construir una posición larga la cual debe ir ligada a un stop que debe colocarse por debajo de 10.247 (la semana pasada se hablaba de 10.284) en términos de cierre.

Por último, en este gráfico se analiza la evolución del Eurostoxx50 contado en base semanal desde marzo de 2009. Al igual que el resto de índices analizados, el comportamiento de la semana pasada formó también una vela bajista que logró perforar la media de 13 semanas.

En este sentido, la reacción de esta semana será también determinante. Si la vela de la semana pasada no tiene continuidad, tal y como ha ocurrido en todas las ocasiones anteriores en las que se ha perforado la media comentada, estaremos ante otra corrección de grado menor. Por el contrario, si se pierde el 3.130 en cierre semanal, se abrirá una ventana correctiva que podría llevar el índice por debajo incluso de los 3.000 puntos en donde se encuentra la zona principal de soporte de toda la estructura de subida de los últimos dos años.

Por lo tanto, hay que modificar levemente la estrategia planteada a lo largo de la semana pasada. Entre el 3.130 y el 3.090 se debe asumir el riesgo de comprar. Sin embargo, el stop debe solo ejecutarse en caso de que el cierre semanal se sitúe por debajo de 3.130.

No es la primera vez, desde que se logró superar la zona de resistencia estructural allá por los meses de septiembre y octubre, que los índices europeos terminan una semana formando una gran vela bajista. En todas las ocasiones, las caídas no tuvieron continuidad ya que los índices lograron darse la vuelta rápidamente. Por ello, el comportamiento de esta semana será determinante para el devenir más inmediato del conjunto de las bolsas.