Seguimos con el 'miedito' en el cuerpo

Vela negra para el Ibex 35, que presionó de nuevo su zona de soporte clave a muy corto plazo sin perforarlo al cierre tal y como puede verse en los gráficos adjuntos. La posibilidad de un patrón realmente amenazante para el corto plazo pasa por la marca de nuevos mínimos con ruptura de soporte decreciente. La vela mensual que los precios van a proponer plantea un proceso de clara continuidad dentro del movimiento lateral en el que vive el índice desde hace cuatro meses, con soporte clave en la directriz alcista alcanzada en los mínimos de agosto.

El EuroStoxx 50 presionó de nuevo su zona de soporte clave a muy corto plazo sin perforarlo al cierre tal y como puede verse en los gráficos adjuntos. Entre el soporte decreciente, clave para confirmar una formación de vuelta de tipo cabeza y hombros (hch?), y la zona de soporte natural que suponer haber corregido el 38,2% del alza previa, tienen los alcistas sus trincheras.

La posibilidad de un patrón realmente amenazante para el corto plazo, que ayer no se confirmó gracias al concurso de Wall Street, pasa por la marca de nuevos mínimos con ruptura de la zona de soporte presionada ayer, algo que ayer se intentó intradiariamente y que ha conseguido abiertamente el Dax 30 alemán. La vela mensual que los precios van a proponer plantea un proceso de clara continuidad dentro del movimiento lateral en el que vive el índice desde hace cuatro meses, con soporte clave en la directriz alcista alcanzada en los mínimos de agosto.

Volvió a dejar a los osos con un palmo de narices Wall Street, capaz de desplegar una nueva vela blanca sobre zona de soporte clave, esos 4.000 puntos del Nasdaq 100 que tomamos como referencia clave para plantear un deterioro más o menos generalizado del mercado norteamericano. En Wall Street, el S&P 500 ha hecho ya un primer amago para moverse en la dirección de desafío a los alcistas que viene presionando al Russell 2000 durante todo 2014. El fuerte repunte de la volatilidad, que se acercó a su zona clave en el día de ayer, sigue planteando una impresionante divergencia que es propia de los procesos de techo potencial.

Mantengo la idea de que el mercado sigue estructuralmente alcista. Si en julio considerábamos razonable pensar en algún tipo de ajuste más bajista que lateral a la tendencia de fondo, los acontecimientos de agosto plantean serias dudas sobre ello, con importantes reacciones desde zonas de importante soporte en tendencia para las plazas europeas. Al otro lado del charco, el mercado presenta una fuerte resistencia creciente para el S&P 500 y una importante divergencia entre el Russell 2000 y el conjunto del mercado.