Septiembre, otro mes de transición

Hueco y vela negra para el Ibex 35, que se alejó nuevamente de su zona de soporte clave a muy corto plazo aunque sin batir ni siquiera los altos del día previo al cierre; y mucho menos el máximo del pasado martes que es el primer nivel de resistencia relevante de cara a una figura de vuelta dentro de la actual corrección lateral/bajista.

La vela mensual desplegada nos habla de un proceso de clara lateralidad.

Consolidativa, supone un patrón de ida y vuelta desde zona de máximo histórico. Con soporte clave entre la directriz alcista alcanzada en los mínimos de agosto y el soporte horizontal asociado, la posibilidad de un patrón amenazante para el corto plazo pasa por la marca de nuevos mínimos con ruptura de soporte decreciente.

En el conjunto de Europa respondieron también los toros al golpe de los osos en la sesión previa. Esto supone un respiro, importante, pero poco más. Los precios sigue presentando un amenazando perfil en caso de recaída y ruptura de las zonas de mínimos de las últimas horas. La vela mensual, confirmando el patrón potencialmente alcista de agosto, es el alivio que ofrece la sesión de ayer a los compradores.

En cuanto a Wall Street, el día nos pide hablar del reversal mensual de septiembre como patrón con pocas connotaciones a priori. La situación se mantiene estable mientras el Nasdaq 100 se mantenga por encima de los 4.000 puntos, con una doble espada de Damocles: la ya tradicional en 2014 falta de fuerza relativa que plantea el Russell 2000, y un continuo ascenso de la volatilidad desde primeros de julio que pone sobre la mesa una inquietante divergencia potencialmente bajista.

Mantengo la idea de que el mercado sigue estructuralmente alcista. Si en julio considerábamos razonable pensar en algún tipo de ajuste más bajista que lateral a la tendencia de fondo, los acontecimientos de agosto plantean serias dudas sobre ello, con importantes reacciones desde zonas de importante soporte en tendencia para las plazas europeas. Al otro lado del charco, el mercado presenta una fuerte resistencia creciente para el S&P 500 y una importante divergencia entre el Russell 2000 y el conjunto del mercado.