El Eurostoxx 50 también hace historia

Sí avanzó al cierre semanal el EuroStoxx 50, que batió de ese modo el nivel de altos de 2007 y 2000,haciendo historia. Se encuentra, sin embargo, en zona de importante resistencia y con un recuento de onda de Elliott que, para el corto plazo, parece pedir una pausa no tardando demasiado. La vela semanal, también de tipo hombre colgado aunque en este caso con cuerpo real blanco, debería considerarse un elemento consolidativo. El índice está, no obstante, a un 6% del objetivo mínimo teórico de la formación de tipo cabeza y hombros invertido (HCHi) de la que aquí dimos buena cuenta con la ruptura de los 6.100 puntos del índice total return; adelantándonos así a cualquier ruptura de los índices de uso común, de contado, que hemos visto después.

En Wall Street, sin embargo, la semana fue dura tras los récords cosechados durante la primera sesión de misma, cuando el Nasdaq Composite se encaramó a los psicológicos 5.000 puntos. No se perciben, más allá de la resistencia creciente que presenta este índice a esa altura y de la falta de confirmación que manifiesta el Dow Jones Transportes, el único de los grandes bajo resistencia intermedia de corto plazo, significativos problemas en términos direccionales.

Es cierto que el nivel de optimismo que muestran las encuestas de sentimiento sigue siendo demasiado elevado, pero no lo es menos que la rotundidad del mensaje de éstas es considerablemente menos claro de lo que lo fuera en un 2014 en el que, sin embargo, el mercado avanzó con fuerza. Una fuerza que, de hecho, ha sido refrendada con ruptura de resistencia clave en el caso del Russell 2000 durante febrero; lo que teóricamente ha liberado al índice de un año de lateralidad. El movimiento de recaída puede considerarse un pull-back hacia la misma, y de hecho podría explicarse, básicamente, por el nuevo movimiento alcista del billete verde.