Hemos evitado el crash, pero quizá no hemos visto el suelo

Sin alcanzar el objetivo mínimo al que proyectaba la ruptura de la zona de los 25.000 puntos del IBEX total return, coincidente con el primer gran soporte de medio plazo del mercado que se sitúa en niveles de 22.000 puntos, mínimos del pasado octubre, el índice vivió una brutal semana de ida y vuelta. Lógica por sobreventa a muy corto plazo, no esconde el deterioro que plantea la vela mensual de agosto. Estamos en zona de primer resistencia.

El mercado estuvo al borde de un crash durante la semana pasada. La situación, sin embargo, se superó de forma solvente y se produjo lo más probable. Un crash nunca lo es aunque en estos días la probabilidad de este tipo de eventos haya aumentado muy significativamente. El rebote es una oportunidad para adecuar la exposición a un mercado que ha perdido muchos argumentos direccionales desde que se dejó los 6.650 puntos de su versión total return. Pudiendo éste continuar, quizá tras un ajuste bajista previo, parece difícil que se haya visto el final de un proceso como el que vivimos y que nace en la zona de alto histórico del mercado. Seguimos pensando que debiéramos ver nuevos mínimos -la zona 8.200 puntos del DAX30 sería óptima- antes de que merezca la pena estar plenamente invertidos en renta variable.

Reacción intensa, desde el mínimo de octubre en el caso del Dow Jones Industrial, que no altera las sensaciones por muy alcanzados que hayan sido los 50 puntos del VIX y el ratio put7call haya llegado a zona de suelo potencial nuevamente. Las velas mensuales que desplegarán S&P500 y Nasdaq son de tipo envolvente bajista y redundan. Es el mismo patrón que tuvimos en junio, alerta que descartamos antes de tiempo por considerar consumido mucho tiempo en lateral a la espera de otro tramo de ganancias previo al ajuste que, finalmente, ha sobrevenido.

Un ajuste que no parece suficiente para dejar al mercado realmente limpio, como no lo fue el `flashcrash´ de 2010. El mercado puede haberse acercado a su zona de soporte con el terremoto, pero sería raro que éste no se produjeran réplicas que nos permitan ver de nuevo a los precios en la zona de mínimos del pasado octubre. Ir mucho más allá no parece necesario...