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Híbrido o híbrido enchufable
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Carlos Cancela

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Carlos Cancela

Híbrido o híbrido enchufable

Aunque por el nombre resultan parecidas, son en realidad dos tecnologías muy diferentes. Una, la primera, representa el pasado y el presente de la automoción, mientas

Aunque por el nombre resultan parecidas, son en realidad dos tecnologías muy diferentes. Una, la primera, representa el pasado y el presente de la automoción, mientas que la otra, la enchufable, supone el futuro a corto y medio plazo para conseguir unos coches menos contaminantes y también una utilización más racional.

De cara al futuro, el coche movido por electricidad parece la solución más lógica, o al menos la que los fabricantes y gobiernos plantean como la mejor. Sin ruidos y sin emisiones, siempre que la energía se obtenga de forma ecológica y no quemando carbón, es la forma de hacer nuestras ciudades un poco más limpias y habitables.

Pero conseguir que se generalice el uso del coche eléctrico, trasformar nuestros hábitos hacia el coche electrificado va a ser complicado, y mucho más aún con la crisis en la que estamos sumidos y que parece que va para largo.

Por eso hay que buscar alternativas que permitan ir acercando el concepto del coche movido con electricidad. Y para eso ha servido hasta ahora el coche híbrido y a partir de los próximos meses empezará a funcionar el híbrido enchufable.

El coche híbrido tiene un motor de gasolina o gasóleo que es el que mueve casi siempre el coche. Lleva unas baterías bastante limitadas en su capacidad y un motor eléctrico. Las baterías solo se pueden recargar  mediante recuperación de energía, en las frenadas o en una bajada pronunciada, etcétera.

De esta forma un coche híbrido solo sirve para hacer 2 o 3 o máximo 4 kilómetros en modo solo eléctrico y con el térmico apagado. Por ello, su utilidad es bastante limitada. Sin embargo, para un uso en ciudad es muy útil porque gracias a este motor y las baterías pequeñas puede llevar una parte del tiempo el motor de gasolina apagado y su consumo baja bastante. Y además el apagar el motor en cada detención aporta aún un mejor consumo. Y por ello cada día se ven más vehículos de este tipo utilizados en el servicio del taxi.  

Pero sus baterías son muy limitadas. Y se preguntarán ¿por qué no se ponen unas más grandes y se soluciona ese problema?. Pues básicamente por tres cosas. Una, la primera, por su elevado precio, ya que las baterías son muy caras.

La segunda razón es por peso, ya que al llevar muchas baterías el coche pesaría mucho más  y con ello ya no lograríamos reducir tanto el consumo, que es una de las razones de la aplicación de la tecnología híbrida. Y hay una tercera y es que aunque lleváramos grandes baterías, no las podríamos recargar mucho salvo que frenáramos mucho o bajáramos muchas pendientes con el pie levantado.

Hablemos ahora de la tecnología del híbrido enchufable. En este caso lleva unas baterías bastante más capaces y el coche se parece más a un vehículo eléctrico. Estos vehículos son capaces de recorrer por encima de 30 kilómetros en modo solo eléctrico (aunque ya se habla de hasta 60 km en algunos prototipos).

Además, el sistema está preparado para funcionar hasta al menos 50 o 60 km/h, o incluso 100 km/h solo con electricidad, por lo que permite hacer una parte de nuestros desplazamientos diarios en modo eléctrico.

Por ello, el híbrido enchufable es una nueva tecnología que pronto muchos fabricantes van a ofrecer en el mercado. Y permite un acercamiento al funcionamiento del coche 100% eléctrico, pero sin el problema de quedarse tirado cuando se agotan las baterías.

Un usuario de uno de estos modelos lo enchufará cada noche en su casa. A la mañana siguiente irá al trabajo una parte del tiempo o todo el recorrido si es corto y no muy rápido en modo solo eléctrico, sin usar gasolina. Luego, lo conectará si tiene un enchufe en su oficina y volverá a hacer su desplazamiento de vuelta a casa. Y siempre tendrá la alternativa de que se encienda el motor térmico cuando sus baterías se hayan agotado por falta de un enchufe adecuado a sus necesidades.

En este sentido Toyota tiene una gran experiencia. Lleva ya muchos años comercializando un vehículo híbrido como el Prius y con un gran éxito comercial. Pronto ofrecerá también una variante de 7 plazas del mismo modelo, y ya cuenta con la tecnología híbrida en otros dos modelos de su gama, el compacto Auris y el urbano Yaris. Y dentro de su marca de lujo, Lexus, cuenta con variantes todocamino y hasta tres berlinas distintas equipadas con esta tecnología. Y lo mejor es que ya ha comenzado a entregar las primeras unidades de su Prius enchufable.     

Aunque por el nombre resultan parecidas, son en realidad dos tecnologías muy diferentes. Una, la primera, representa el pasado y el presente de la automoción, mientas que la otra, la enchufable, supone el futuro a corto y medio plazo para conseguir unos coches menos contaminantes y también una utilización más racional.