Un plan global para la reindustrialización

El Gobierno dio el pasado viernes en el Consejo de Ministros un fuerte apoyo al sector de la automoción, pero también supone un gran refuerzo en favor de la industria,la eficiencia energética oel transporte. No han sido, como en otras ocasiones, un nuevo plan PIVE o un PIMA Aire para vehículos comerciales, sino que se trata de un conjunto de medidas de amplio calado que van a proporcionar nuevos aires al sector el automóvil y a la economía española.

Sin duda uno de los apoyos más importantes es el plan PIVE 6 que contará con una partida de 175 millones de euros, que van a permitir quitar de la circulación otros 175.000 vehículos viejos, contaminantes y muy poco seguros. Hasta ahora ya se han retirado, con los anteriores planes PIVE, 540.000 vehículos con una edad media de 16 años. Un coche con 16 años de antigüedad no tiene en la mayor parte de los casos ni ABS, ni airbags y, si no se ha mantenido bien, es un auténtico peligro en la carretera.

También se ha aprobado un PIMA Aire 4 para vehículos comerciales con 10 millones de euros de dotación y otro Plan Movele para incentivar la compra de vehículos eléctricos igualmente dotado con 10 millones de euros.

Otro aspecto muy importante es que se ha abierto una línea de crédito con el BEI, de 400 millones de euros, para la adquisición de vehículos pesados, que permitirá poner en circulación 2.500 vehículos nuevos, más eficientes y seguros en el transporte. Y 5 millones de euros para el achatarramiento de este tipo de vehículos pesados más viejos.

Y es que salvo las motos, que creo que es una pequeña laguna porque permitiría reducir en parte los atascos en las ciudades con vehículos menos contaminantes, todos los tipos de vehículos han sido contemplados en este programa del Gobierno.

Pero los planes puestos en marcha no se quedan ahí, en simplemente ofrecer ayudas para que los ciudadanos puedan cambiar de vehículo por otro mucho más eficiente. Uno de estos aspectos que cambian es la Reforma del sistema de garantías mobiliarias, que regula las garantías sobre bienes (existencias, stocks, etc.) y el procedimiento de recuperación de los bienes muebles dados en garantía, en caso de impago de la deuda. Un tema importante en el que la asociación de fabricantes de automóviles, ANFAC, lleva muchos meses trabajando.

También el nuevo plan para la Racionalización de la Normativa Medioambiental y Urbanística o la mejora de las infraestructuras de transporte, con dos aspectos muy importantes referidos a las concesiones de los puertos y su adaptación a la normativa europea. O en el transporte por carretera, con la adaptación progresiva de los pesos y dimensiones de los vehículos al marco vigente en los países de nuestro entorno.

Otro aspecto muy importante relacionado con el vehículo eléctrico pero que también va más allá de la ayuda para comprar este tipo de vehículos. Se trata del Marco normativo de las infraestructuras de recarga de vehículos eléctricos, con la eliminación de los obstáculos actuales para el desarrollo de las infraestructuras de recarga.

También se han aprobado ayudas para la reindustrialización y el fomento de la competitividad industrial, con el apoyo financiero mediante una línea de crédito de 745 millones de euros para la concesión de préstamos a sectores industriales. O mel programa «CIEN» de financiación de grandes proyectos de investigación industrial en sectores estratégicos.

La creación del Fondo Nacional de Eficiencia Energética (FNEE), dotado con 350 millones de euros anuales. Este fondo cofinanciará inversiones de eficiencia energética en edificación, transporte, industria, servicios y sector agrícola. Entre ellos destaca el Plan para la mejora del uso eficiente de los medios de transporte y cambio modal de personas y mercancías hacia modos más eficientes, que incluirá la promoción de Planes de movilidad sostenible en ayuntamientos, planes de transporte sostenible al centro de trabajo, gestión de flotas de transporte por carretera y cursos de conducción eficiente.

Lo que el Gobierno ha puesto en marcha es todo un plan de mejora de la competitividad, con muchas medidas concretas que van a llevar a que nuestro país gane muchos enteros en cuanto a competitividad industrial frente a nuestros países vecinos. Un plan con el que reindustrializar España y que de alguna forma va a contribuir a reindustrializar también Europa. En los últimos años, por la crisis, pero también por la falta de liderazgo y de posturas claras en Europa, el viejo continente ha perdido terreno frente a los dos grandes grupos a nivel mundial, Estados Unidos y Asia.

Por eso, estoy completamente de acuerdo con las palabras de Rafael Prieto, presidente de ANFAC y CEO de Peugeot en España, que ha comentado que este plan anunciado por el Gobierno supone “una de las noticias más positivas e importantes en los últimos tiempos para el sector del automóvil y para la economía de nuestro país".

Prieto agradece también “el esfuerzo que este plan supone y el convencimiento del retorno que tendrá para el sector, para la economía y para la sociedad. Apoyar al automóvil supone apostar por el crecimiento de España, por la creación de empleo estable y de calidad, basado en el valor añadido y un profundo conocimiento industrial y, en definitiva, por la recuperación económica constante y estable en el tiempo”.