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¿Se pueden hacer bien las obras?
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Carlos Cancela

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Carlos Cancela

¿Se pueden hacer bien las obras?

Con el verano, como cada año, llegan a Madrid y a algunas otras ciudades españolas la operación asfalto en la que aprovechando el menor tráfico se

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Con el verano, como cada año, llegan a Madrid y a algunas otras ciudades españolas la operación asfalto en la que aprovechando el menor tráfico se ponen al día algunas zonas viales de la ciudad. El reasfaltado es una operación clave de mantenimiento, pero como para todo en la vida la clave es hacerlo bien.

La pasada semana ha comenzado el reasfaltado de la carretera de La Coruña y el primer tramo es el de la salida de Madrid, desde Moncloa y por la señalización de obras que he podido ver debería llegar hasta la Puerta de Hierro. El primer tramo reasfaltado ya tiene el mismo problema de siempre, el de la terminación chapucera.

En el paso subterráneo de la universidad Complutense hay rejillas en los laterales para permitir la salida de agua cuando hay lluvia. Los empleados de la empresa encargada de hacer la obra se ocupan de levantar parte del asfalto viejo, de limpiar la zona y de reasfaltar, pero nunca se ocupan de arreglar y levantar las rejillas, con lo que los agujeros son cada vez mayores. Y al ser un carril muy estrecho se crean situaciones de peligro.

Ya que se va a reasfaltar una zona, yo creo que lo mejor que se puede hacer es que el resultado de dicha obra sea bueno. Vamos, que quede bien. Pero no, como todo en España, el objetivo es siempre el mismo, que parezca que se ha solucionado algo, para lo que se gasta mucho dinero, pero que nunca queda como debe. Y así, unos meses después siempre se puede decir que hay que arreglarlo de nuevo, pero ya con otro presupuesto.

El túnel de María de Molina, una obra muy buena que permite conectar una zona bastante céntrica de Madrid con la M30, tiene la misma chapuza. Después de gastar decenas de millones de euros en la obra, con un notable incremento con respecto al presupuesto aprobado, las alcantarillas quedaron situadas en mitad de la calzada.

Quizá había algún problema técnico que obligaba a poner dichas tapas de alcantarilla en el centro del carril, y eso es algo que se podría entender. Pero entonces por muy poco dinero se puede hacer que esas tapas no estén hundidas, con el peligro que supone para la conducción. Pero sobre todo, es una incomodidad para los usuarios de ese túnel y una fuente de averías para los coches. Y esa obra, como todo lo que se hace en España, se paga con los impuestos.

Otro ejemplo muy claro de la chapuza nacional en las carreteras es la ausencia de asfalto drenante, el que absorbe el agua cuando hay fuertes lluvias. Este tipo de asfalto, que aumenta notablemente el agarre del neumático y mejora la visibilidad, debería instalarse al menos en las principales vías interurbanas, en las más transitadas. El sobrecoste es realmente mínimo al construir un tramo de carretera, pero la seguridad que proporciona cuando aparece la lluvia es realmente elevada.

En España prácticamente no se utiliza el asfalto drenante, porque supone un sobreprecio en la obra. Pero lo curioso es que construir un tramo de carretera en España cuesta el doble que hacer un tramo equivalente en Alemania, pero allí sí se emplea el asfalto drenante.

Otro aspecto importante es la forma de repartir el presupuesto disponible para hacer el reasfaltado. Hay algunas zonas de Madrid que son casi intransitables por la cantidad de agujeros que hay en el asfalto. Pero otras calles próximas tienen un muy buen asfalto siempre.

Les voy a dar un ejemplo. Cuando uno va en dirección sur por Bravo Murillo y llega a la Glorieta de Quevedo, hay dos calles hacia el sur, Fuencarral y San Bernardo. La primera tiene muy buen asfalto, y cada poco tiempo le “toca” un reasfaltado. Por el contrario, en San Bernardo, sobre todo hasta llegar al cruce con Rodríguez San Pedro, se va circulando entre agujeros. Si este año no la reasfaltan habrá que poner una señal de “solo para todoterrenos”.

Con el verano, como cada año, llegan a Madrid y a algunas otras ciudades españolas la operación asfalto en la que aprovechando el menor tráfico se ponen al día algunas zonas viales de la ciudad. El reasfaltado es una operación clave de mantenimiento, pero como para todo en la vida la clave es hacerlo bien.

Ayuntamiento de Madrid