La semana fantástica… del automóvil

La semana pasada, la primera semana del mes de junio, fue una semana fantástica para el automóvil en España. Se hicieron públicas las cifras de ventas del mercado español del automóvil en mayo, con una subida de un 21%, un resultado muy bueno. El miércoles 1 de junio, Renault anunció, ante la presencia del rey Felipe VI, una inversión de 750 millones de euros en sus plantas españolas hasta 2020. Y solo un día después, el vicepresidente mundial de Volkswagen, Francisco Javier García Sanz, anunció la producción de un segundo modelo en la planta navarra de Landaben (Navarra) junto al Polo. ¿Se puede tener una mejor semana?

La verdad es que el sector del automóvil vive un muy buen momento como consecuencia del apoyo incondicional de los trabajadores que saben que conviene apretarse un poco el cinturón para a cambio poder tener un prometedor futuro. Y el resultado es que las factorías españolas son cada vez más competitivas y parece que ya empieza a quedarse muy corta esa cifra de tres millones de vehículos anuales que hace cuatro o cinco años parecía una utopía.

Comencemos por las ventas de coches, un aspecto importante si se quiere posicionar a España en lo más alto dentro de la industria automovilística europea. La confianza de los ciudadanos está en un momento delicado, descendiendo mes tras mes por culpa de unos políticos que no son capaces de gestionar acuerdos, y con las elecciones a tres semanas vista que tampoco apuntan a una solución fácil al problema.

Pero cuando las ventas podrían flaquear un poco por este motivo que afecta fundamentalmente al mercado de particulares, llegan los alquiladores para seguir tirando del carro, como un relevo perfecto. Y es que ante la previsión de una campaña turística 2016 espectacular han hecho acopio de vehículos nuevos para los visitantes y han permitido un crecimiento de las ventas de un 21%.

Donde realmente está lo más importante de esta semana fantástica está en Palencia y en Navarra, dos focos clave de la industria española. Si el miércoles era la planta castellana de Renault el escenario en el que se hacía un importante anuncio para el sector industrial, el jueves fue la planta de Landaben la agraciada con un nuevo “gordo”.

En el caso de Renault, el director delegado para la Competitividad de Renault Thierry Bolloré, anunciaba 750 millones de euros de inversión como consecuencia del tercer plan industrial aprobado por los trabajadores. Este plan va a llevar a la creación de 2.000 nuevos puestos de trabajo directos y a mejoras importantes en las tres factorías de Renault. En Valladolid se va a producir un nuevo modelo que aún no se ha anunciado, pero también un nuevo motor, en Palencia una nueva planta para hacer piezas en aluminio y también nuevas cajas de cambio en Sevilla. Y es que la apuesta por España de Renault es muy firme.

Solo 24 horas después, Francisco Javier García Sanz, el vicepresidente mundial del grupo Volkswagen y máximo responsable de compras del consorcio, anunciaba que en Landaben se va a fabricar un segundo modelo, por primera vez en su historia, junto al Polo. No se han concretado las inversiones, pero serán varios cientos de millones de euros, y nuevos puestos de trabajo en Navarra.

Unos días antes de estos importantes anuncios, también el grupo alemán Daimler anunciaba nuevas inversiones para aumentar la capacidad de producción de la planta de Vitoria en la que se producen en exclusiva para todo el mundo el Vito y la Clase V. La razón hay que buscarla en la gran calidad de los productos fabricados en la planta del País Vasco que están teniendo un gran éxito comercial en todo el mundo.

La planta de Ford viene de poner en marcha la producción de los modelos más avanzados de la marca del óvalo en Europa, los Mondeo incluyendo la versión híbrida y el S-Max, vehículos muy sofisticados y con un gran valor añadido. Ya se sabe que la planta de Seat en Martorell va a fabricar el nuevo Audi A1, con las importantes inversiones que esto conlleva. Y en la plantas del grupo francés PSA se esperan nuevos modelos, lo mismo que en la planta de Opel en Figueruelas, que poco a poco se está adaptando a la producción de un nuevo monovolumen compacto.