Del perro que disparó a su dueño a la pirata que abordó un ferry

“Un francés ha sido disparado por su perro durante una cacería en la región de Dordoña”. Este era el subtítulo que el diario The Telegraph colocaba a la noticia más delirante de la semana. Evidentemente no se trataba de un perro psicópata cansado del patán de su dueño, sino de una absurda, pero divertida historia, montada de la nada. El dueño del perro tuvo que ser amputado, pero sólo por cometer la imprudencia de dejar un arma cargada y sin seguro en el suelo. Más tarde explicó en la radio francesa que no había sido culpa del perro, que “es adorable”. ¡Lógicamente!  

La noticia, aunque parezca mentira, se ha leído por todo el mundo. Cosas de las redes sociales. Si algo nos hace gracia, aunque nos parezca una chorrada, lo compartimos. Por dentro pensamos que los periódicos tienen mucha jeta y no deberían publicar estas cosas, pero las leemos con avidez. Es la gran contradicción de los medios de masas, que llevan planteándose esta cuestión desde el principio de los tiempos. Desde un punto de vista profesional no tiene mucho sentido publicar estas cosas, pero se leen y mucho, y de una u otra forma todos los medios, hasta los más serios, acaban cayendo en este tipo de informaciones.

Desde un punto de vista profesional no tiene mucho sentido publicar estas cosas, pero se leen y muchoEl rotativo inglés The Telegraph es quizás el más descarado ­–o el más sincero– pues directamente tiene una sección llamada “Weird news” (literalmente, “noticias extravagantes”) y, sorpresa, es una de las más leídas del periódico. El periodismo anglosajón siempre ha sido más flexible con este tipo de historias, y no hablamos sólo de los medios abiertamente sensacionalistas.

En internet la cosa se ha desmadrado. Es posible colocar estas noticias por lo bajini, sin necesidad de que aparezcan en portada, y esperar a que se expandan como la pólvora. Esto da pie a numerosas cuestiones, ¿es menos riguroso un medio sólo por dar también este tipo de noticias? ¿Se puede dar espacio a estas cosas y a la vez hacer trabajos “serios” sin que la imagen del medio salga perjudicada? ¿Tiene cabida el humor en la prensa más allá de las viñetas?

La noticia que no es noticia

Es muy habitual escuchar entre los ciudadanos interesados por la prensa, sean profesionales o no, aseveraciones como “esto no es noticia”, en referencia a informaciones que, piensan, no deberían tener esa condición. Pero, ¿qué es una noticia? En realidad, al menos en el plano semántico, una noticia es, simple y llanamente, el “contenido de una comunicación antes desconocida”, tal como lo define la RAE en una de sus acepciones. Esto no deja de ser cierto. Cualquier cosa que no conozcamos es una noticia, nos parezca relevante o no. Que un dueño dispare a su perro es irrelevante desde el punto de vista periodístico –máxime tratándose de algo falso, pues un perro no puede cometer el acto consciente de disparar–, pero es una noticia, y no nos engañemos, nos hace gracia.  

Cualquier cosa que no conozcamos es una noticia, nos parezca relevante o noBasta repasar lo más leído de la prensa internacional para darnos cuenta de que las “weird news” funcionan. El periódico más leído del mundo en Internet, según la empresa comScore, es el rotativo inglés Daily Mail, cuya noticia más leída de ayer era, textualmente, “!Esto es incómodo! Shia LeBeouf posa con Stacy Martin mientras se preparan para hacer Nymphomania... en la que aparecerán ‘escenas reales de sexo'”.

Poco se puede hacer contra esto. El sexo, los sucesos y las curiosidades interesan más que nunca. Y si se mezclan alguna de estas categorías, mejor que mejor. Ayer pudimos leer en varias cabeceras británicas, incluida la BBC, que “la mujer borracha y drogada que robó un ferry y lo estrelló contra varios barcos gritando que era Jack Sparrow ha sido encarcelada”. ¿Cómo podíamos vivir tranquilos hasta ahora?