Diario de la pandemia
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Día 20. Piquitos de oro: "Las muertes no tienen que ver nada con el coronavirus"
Las frases más descacharrantes de los políticos mundiales sobre la gran jaqueca
Yo soy el doctor Pitagorín, y usted no lo es.
No van a creer lo que pasó ayer. Comenzamos a jugar al Quimicefa a las 10 de la mañana, y aquí seguimos, a las tres de la madrugada del día siguiente, cuando escribo estas líneas. Es la partida de Quimicefa más larga de la historia. Los niños tienen los ojos inyectados en sangre. Hemos descuidado nuestra higiene. Nos alimentamos con plátanos. No podemos parar. Estamos a punto de realizar el mayor descubrimiento científico de todos los tiempos: el coronavirus es solo un bichito que, si se cae de la mesa, se mata. Al bichito lo llamaremosTrufa, el coronavirus bueno. Trufa, saluda a estos señores: "Hola".
¿Le parece a usted absurdo estar hablando con Trufa? Pues esperen a oír las cinco declaraciones políticas más descacharrantes sobre el virus.
Bienvenidos a los diarios de la pandemia.
El horror, el horror
1) "La mayoría de las muertes no tienen nada que ver con el coronavirus, nada que ver. Son personas que estaban en una región fría [Italia]". Jair Bolsonaro, presidente de Brasil.
Quizá lo peor de la declaración de Bolsonaro no sea decir que los que mueren por coronavirus no mueren por coronavirus —¿de qué si no?, ¿están lloviendo pianos sobre nuestras cabezas?— sino confundir Italia con Laponia.
2) "Tan de riesgo es que los niños jueguen en un parque a que jueguen en un recreo, punto. Hay que hablar claro a la gente, y sobre todo a la gente que pretende tener 15 días de vacaciones". Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha.
Contexto: Emiliano rechazó cerrar las escuelas solo porque "algunos quieran 15 días de vacaciones"; luego reculó. García-Page siempre presume de hablar claro. Vamos a hablar claro nosotros también: Emiliano ha dicho una chorrada como un piano.
El coronavirus desaparecerá. Un día, como un milagro, desaparecerá. Tal vez se vaya
3) "No dejen de salir... Yo les voy a decir cuándo no salgan. Sigan llevando a la familia a comer, a los restaurantes, a las fondas, porque eso es fortalecer la economía familiar, la economía popular. No hacemos nada bueno si nos paralizamos sin ton ni son, de manera exagerada". Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.
¡A los restaurantes, a las fondas, a las congas! Una cosa es no tomar medidas drásticas contra el virus, pero al menos recomendar quedarse en casa, y otra jalear al personal para irse de farra. ¡A socializar, a socializar, que el mundo se va a acabar!
4) "El coronavirus desaparecerá. Un día, como un milagro, desaparecerá. Tal vez se vaya. Ya veremos. Nadie lo sabe en realidad... En abril, supuestamente, morirá con el calor". Donald Trump, presidente del mundo libre.
Relato corto: cuando se levantó, el coronavirus ya no estaba allí. Nadie sabía los motivos. Lo mismo que vino se fue. Los infectados dejaron de toser, los entubados echaron a andar y los niños salieron por fin a la calle... y prendieron fuego a todo de puro resentimiento. Abril caliente.
5) "¿Qué pasa si este virus muta hacia una forma más benigna? ¿Qué pasa si muta y se pone buena persona?". Jaime Mañalich, ministro de Sanidad de Chile.
¿Qué pasa si el virus es en realidad Mahatma Gandhi, eh, qué pasa? Primero, crucificamos a Jesús de Nazareth, ahora, al coronavirus. ¿Es que nunca aprenderemos? ¡Dejemos al virus defenderse!
Entrevista a Trufa
Trufa, el coronavirus bueno, rompe su silencio para desmentir las cosas horrorosas que se están diciendo sobre él.
—Hola, Trufa.
—Hola. ¿Te puedo tocar?
—Como te acerques, te meto dos tiros.
—¡Pero si soy buenísimo! La gripe es el Carnicero de Milwaukee a mi lado. Soy una florecilla delicada, lo dicen Trump y Bolsonaro, y esos dos nunca mienten.
—Eso es verdad.
—¡Pues bésame, tonto!
—Muak.
—¡QUE PASE EL SIGUIENTE!