Es noticia
Navegar sin temor
  1. Comunicación
  2. Foro Interno en Construcción
Gustavo Bravo

Foro Interno en Construcción

Por
Gustavo Bravo

Navegar sin temor

Llevo una bitácora a mano de cada paso que hemos dado en esto. Me tacharán de anticuado, pero no hay nada como ver el paso de

Llevo una bitácora a mano de cada paso que hemos dado en esto. Me tacharán de anticuado, pero no hay nada como ver el paso de los días escritos en bolígrafo. A diferencia de esta columna, las anotaciones de las que hablo sólo me las muestro a mí mismo. A veces, cuando se siente que el tiempo pasa pero algo no avanza, no hay más que pasar las hojas y ver que en realidad todo cambia, aunque sea muy poco a poco.

Visto que causó escasa sensación aquello de abrir las ventanas para echar un vistazo al exterior, cerremos y volvamos a lo nuestro. Pasa a veces que uno se organiza de un modo, pero en realidad es absurdo intentar encauzar lo que bien está sin forma y libre. Ustedes escriben bajo estas líneas pero gozan del poder del timón y de la última palabra, como debe ser.

Estamos perfilando la herramienta de votación de comentarios. Dentro de poco también podrán votarse las opiniones expuestas bajo las noticias y no sólo dentro del foro en el que se muestra la totalidad de ellas. Además, podrá saberse cuántos votos tiene un comentario sin haberlo votado, aunque para saber quién lo ha hecho sí será preciso votar.

Tampoco va a ser posible votarse a uno mismo. Pensé que esta medida no iba a ser necesaria pero pequé de ingenuo. Así que dentro de poco esto cambiará también. Estos cambios los irán viendo aparecer poco a poco. Mientras, en la portada de El Confidencial ya pueden ver el comentario más votado o, en caso de empate, el que más nos haya gustado de los elegidos por ustedes.

Ahora que la web está cambiando es importante que consideren algunos factores. Algunos lectores me han escrito estos días sobre errores en el foro. Salvo un problema en concreto, que ha sido detectado y subsanado, algunos lectores padecían en sus ordenadores los efectos de un navegador anticuado.

Es algo parecido a lo que le sucederá a sus televisores con la TDT si no se actualizan. Todo cambia y es preciso adaptarse con el todo, al menos en lo tecnológico. Muchos lectores de este periódico utilizan una versión antigua del navegador Internet Explorer. Cualquier versión que tengan ustedes anterior a la 7.0 se considera ya antigua, y este navegador no se actualiza automáticamente. Como somos conscientes de que estos aspectos tan técnicos no son siempre fáciles, les incluyo al final de estas líneas un enlace donde pueden descargar la actualización. Gratis, por supuesto.

Los lectores con otros navegadores no deberían tener ningún problema, porque tanto Firefox como Chrome o Safari se actualizan solos. Navegar sin temor por el mar es lo mejor, así que no duden en actualizar sus máquinas porque en este aspecto no merece la pena ser conservadores.

El otro día leía en un diario que al parecer ya existe un síndrome de Diógenes electrónico. Consiste en acumular basura en el ordenador y en el email y resistirse a eliminarla. En caso de que actualicen el navegador no teman por los residuos de la versión anterior. Se van solos. Por lo demás ya no les pregunto.

Descargar Internet Explorer 7

Llevo una bitácora a mano de cada paso que hemos dado en esto. Me tacharán de anticuado, pero no hay nada como ver el paso de los días escritos en bolígrafo. A diferencia de esta columna, las anotaciones de las que hablo sólo me las muestro a mí mismo. A veces, cuando se siente que el tiempo pasa pero algo no avanza, no hay más que pasar las hojas y ver que en realidad todo cambia, aunque sea muy poco a poco.