Bruce Dickinson ahora es monologuista: "No puedes ser un Iron Maiden todos los días"

“El show es básicamente un monólogo cómico ('standard comedy') e improvisación echando un vistazo a mi vida. No voy a leer nada de mi libro. Es una actuación de tres horas, sólo yo, hablando e interactuando con el público. Es una mirada a mi cabeza, ver el modo en el que mi cerebro funciona de una manera divertida”. Bruce Dickinson, cantante de Iron Maiden, actuará en Madrid este martes 26 de febrero y no pondrá los pelos de punta o hará mover la melena (supongo) al público, pero sí que hará reír y hará reflexionar al personal… que sepa inglés. Es la última arriesgada apuesta del hiperactivo vocalista británico.

Paul Bruce Dickinson tiene 60 años y está lejos de cansarse y de un retiro para llevar una vida más tranquila. Acaba de concluir una gira de dos años con los Maiden y ahora ha comenzado una como monologuista, en la que está tres horas intentando sacar la risa de su público a la vez que cuestionando aspectos sobre su propia experiencia que motivarán o darán que pensar al oyente, al menos este es el objetivo y lo que consigue entre el público anglosajón. El español no sabe cómo reaccionará en este show: “No he estado nunca ante el público español (como monologuista). No estoy seguro de que todos sepan inglés, podríamos tener un problema porque mi español es terrible. En conciertos, por supuesto que los españoles tienen otra cultura (que los británicos) y una pasión diferente”, señala en una charla con El Confidencial.

50 euros por el show Bruce Dickinson

La actuación tendrá lugar en el Teatro Rialto a partir de las 19:30 horas y la entrada oscila entre 50 y 70 euros, con la autobiografía que acaba de publicar de regalo. ¿Merece la pena pagar ese precio por este monólogo? “Me encanta contar historias. En todo lo que hago cuento historias”, asegura Dickinson. Durante un concierto de Maiden ya se sabe más o menos las historias que va a contar (o cantar), aquí, sobre un taburete y con un micrófono de diadema, espera sorprender tanto al que es fan de su música como a alguien que desea conocer la extrovertida personalidad de uno de los artistas más carismáticos en la historia del heavy. También habrá tiempo para hablar con él e interactuar.

¿Qué puede aprender la gente de tu experiencia? “(Risas) ¡No te lo voy a decir! Tienes que estar allí… Hay muchas anécdotas cómicas que me han ocurrido y que se alejan mucho de alguien que puedas decir que es una rockstar. Me tomo la música muy en serio, pero el resto de mi vida la tomo de una manera divertida. Es una vista cómica de la vida, y un acto de creatividad… y, por qué no, a lo mejor canto algo… eso dependerá también del público porque ellos tendrán también tiempo para preguntarme y dependiendo de lo que me pidan yo podré responder”.

No puedes ser un Maiden todos los días

La mímica, gestos y movimientos estarán presentes -“mi gran problema es que expreso mis emociones demasiado y durante todo el tiempo” (risas)”- y se desnudará a la persona que está detrás del nervioso cantante que se ha recorrido el mundo gritando “scream for me!” al público. “Son actuaciones muy diferentes. Maiden, obviamente, es la cosa más grande en mi vida, pero no puedes ser un Maiden todos los días…”. De hecho, cuando no es Maiden -ni tampoco monologuista-, es piloto de aviones (en alguna gira él es el que lleva el propio avión del grupo), esgrimista, guionista, locutor de radio…

Polifacético e inquieto, de todas las actividades que ha realizado en su vida no se queda con una en concreto, sino con lo que siempre ha conseguido tras la mayoría de ellas. “Creo que en mi vida he dado pequeños regalos al mundo... ¿Sabes? Hay mucha gente que puede cantar y no los necesitas para sobrevivir, hay mucha gente que puede escribir canciones y tampoco lo necesitas… Pero he tenido la fortuna de haber sido capaz de encajar todas las piezas en el orden correcto para llegar a la gente y hacerle feliz. Y de eso es de lo que me siento más orgulloso, de ese pequeño regalo”.

La última vez que pisó España fue actuando en el Metropolitano en un histórico concierto para más de 50.000 personas. Así que una de tópicos: ¿qué te gusta de España? “Me gusta el tiempo, en todos los sitios. En el norte la lluvia y montañas y en el sur sol y calor. Me encanta el marisco del norte de España porque es el mejor del mundo, es el mejor que he probado. Me encanta el vino… Creo que España es un lugar fantástico… No saben jugar al fútbol, pero eso da igual (Risas)”. Al igual que una reciente charla con el líder de la banda, Steve Harris, el fútbol inevitablemente sale a escena. ¿Y nuestra música? “De música, para ser honestos, no estoy puesto más allá del flamenco, que me gusta pero no te puedo decir el nombre de ningún artista o entrar en detalles. Sólo puedo decir que el flamenco es hermoso”.

Por cierto, ¿qué te dicen tus compañeros de Maiden de esto? “No sé, nunca han venido a un show, ¡pero nunca se sabe si pueden estar entre el público! (Risas)”. La conversación acaba como empezó, de risas. Supuestamente, algo así ocurrirá el martes 26 de febrero en el Teatro Rialto.

PD: Mensaje de Bruce Dickinson a los asistentes: “¡Por favor, venid y aseguraos de traer el traductor universal con vosotros! (Risas)”.