Es noticia
Una Polla de auténtico récord... aunque no a todos les gusta
  1. Cultura
  2. Área Rock
Víctor García

Área Rock

Por
Víctor García

Una Polla de auténtico récord... aunque no a todos les gusta

La Polla Récords vuelve este 2019 a los escenarios españoles. Las entradas para sus conciertos se están vendiendo a un ritmo vertiginoso con unos precios nunca antes vistos

Foto: La Polla Records: nunca el punk nacional fue tan caro. (EFE)
La Polla Records: nunca el punk nacional fue tan caro. (EFE)

'"¡En media hora se vendieron las entradas de pista! ¡En media hora para un concierto de la Polla!". Las exclamaciones sonaban a cierta indignación para una fan de La Polla Records que no pudo llegar a tiempo para las entradas de pista del primer concierto que el grupo de punk rock había sacado en Madrid, en el WiZink Center que normalmente llenan las estrellas mundiales de la música (incluyendo a El Barrio, que ostenta el récord de llenos en dicho recinto). "¡Y por 40 euros la entrada! Es increíble...", continuaba con cierto hastío.

Nunca antes una banda de rock española (y menos de punk rock) había cobrado tan altas algunas de sus entradas. Esta Polla es de récord (las hay algo más baratas, pero con gastos se acercan a los 40 euros). Solo cuando Enrique Bunbury rompió su silencio —en 2007 con los Héroes— se pagó algo más —42 euros— por asistir a un show de un artista nacional de este género musical. Aunque el estilo, filosofía y mensaje es diferente. Por cierto, Marea, que también regresa después de ocho años de ausencia, lo hace con precios menos sorprendentes, en torno a 30 euros, y también con nuevo disco bajo el brazo, 'El Azogue'.

Evaristo Páramos (Tuy, Pontevedra, 1960), ha asegurado en diferentes entrevistas que este regreso después de 16 años no lo hace "por dinero", y que le importa poco quien no se lo crea. También ha querido dejar claro que "aunque seamos punkis, queremos sonar bien. Es lo más importante para nosotros". Y seguramente tenga razón porque quien haya pagado 40 euros por un concierto no sólo querrá ver el show de los padres del punk en España, sino una calidad acorde a una cantidad que nadie —ni Extremoduro, capaces de llenar estadios en suelo patrio— ha pedido a sus fans para verles.

En su gira 'Ni descanso, ni paz!', que arranca en septiembre en la Plaza de Toros de Valencia, de momento hay siete paradas (dos en Valencia, dos en Madrid, dos en Bilbao (entradas agotadas) y una en el Palau Sant Jordi de Barcelona). Sin ser muy extensa, los ingresos solo por tickets que se calculan son de unos 3 millones de euros, un pelotazo a la altura de pocos artistas.

¿Por qué no? ¿Porque es español?

Dentro del mundo del rock y el heavy, siempre se ha reivindicado entre músicos españoles y gente del sector/negocio, que por qué si se pagan auténticas burradas por bandas internacionales, cuesta tanto soltar la pasta para ver a un grupo nacional. Han tenido que pasar 16 años (y un momento político convulso, en el que los mensajes reivindicativos suenan más fuerte) para crear la suficiente expectación como para que esto sea posible.

placeholder Entrada de la Polla en 1994 de 1200 pesetas. (Foto: Bar Leyenda, Madrid)
Entrada de la Polla en 1994 de 1200 pesetas. (Foto: Bar Leyenda, Madrid)

Ahora bien, suena raro que alguien que canta contra el poder y el capitalismo permita que sus conciertos sean los más caros de la historia del rock nacional, sabiendo que habrá gente que les ha seguido siempre que no pueda ir a verlos porque no se lo pueden permitir. Es como si un político que critica a la casta se compra un chalet con parcela y piscina. "Es el mercado, amiga", contesté a la fan que no irá (ya por sus ovarios) a ninguno de los conciertos de la Polla. Está en su derecho, como el de Evaristo y los suyos de poner los precios que les salgan de su nombre. Se lo han ganado, aunque otra cosa será cómo afecta a la credibilidad de su discurso y letras... Aunque, en este caso, afecta mucho más al político que al músico.

"El poder ha decidido otro cambio en nuestras vidas", dice Evaristo Páramos. El poder (de convicción) de un tercero para hacer esta gira y una causa económica no para tener más en el banco... sino para tener. Quizás podían haber sido más baratas las entradas, pero esta gira se debía hacer sí o sí por un compañero. Y eso sí que suena más acorde al discurso de la Polla.

'"¡En media hora se vendieron las entradas de pista! ¡En media hora para un concierto de la Polla!". Las exclamaciones sonaban a cierta indignación para una fan de La Polla Records que no pudo llegar a tiempo para las entradas de pista del primer concierto que el grupo de punk rock había sacado en Madrid, en el WiZink Center que normalmente llenan las estrellas mundiales de la música (incluyendo a El Barrio, que ostenta el récord de llenos en dicho recinto). "¡Y por 40 euros la entrada! Es increíble...", continuaba con cierto hastío.

Rock