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'Better things': tetas y arrugas, o cómo dejar de vivir aterrorizadas por la edad
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Henar Álvarez

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'Better things': tetas y arrugas, o cómo dejar de vivir aterrorizadas por la edad

Pamela Adlon interpreta a una actriz olvidada por la industria. La serie de HBO, abiertamente feminista, retrata con mucho humor el drama que supone el paso de los años en el rostro de una actriz

Foto: 'Better things'
'Better things'

Si la memoria no me falla, hay una escena en 'Mad Men' en la que Pete Campbell y Roger Sterling examinan a un grupo de mujeres y mascullan algo así como “No sé qué pasa con ellas que cuando cumplen los 30 dejan de brillar”. El paso del tiempo es la espada de Damocles cuya sombra se cierne sin descanso sobre el género femenino. 'Better things', la serie de la siempre brillante HBO -me pregunto qué sería de las amantes de las series sin las apuestas de esta cadena -, utiliza la risa como terapia contra las arrugas de la piel, las mismas que nos dejan sin trabajo y oportunidades más allá de los 35, siendo generosos.

Foto: Fotograma de la serie 'Harlots'. (Hulu) Opinión

No hay profesión que sufra más los desmanes de la vejez que la de actriz. Pamela Adlon es Sam Fox, una reconocida intérprete - separada y con tres hijas - que pasa de los cuarenta, sobrevive entre papeles secundarios y las rentas de un pasado mejor. Sinceramente, yo lo paso mal cuando veo una película o serie y las actrices: 1) Son una década más jóvenes que su compañero de reparto 2) Interpretan un papel que no se adecua a su edad y, para obtenerlo, se nota a leguas que han tenido que modificar su cara a base de botox, silicona o vete tú a saber qué. Si eres hombre y estás leyendo esto, imagina que durante toda tu vida ves cómo los papeles masculinos son pectorales andantes que acompañan a una protagonista madura y segura de sí misma, que desaparecen cuando se convierten en adultos y que, cuando reaparecen, la cara les brilla y los pómulos lucen sospechosamente turgentes. La moraleja es que cuando dejes de ser joven dejarás de existir. “Lo aterrador de hacerse mayor es la gente joven” dice con pesar el personaje de Adlon.

El show business

En el mundo del espectáculo existe el tópico de que las mujeres adultas sienten celos de las chicas jóvenes por miedo a que las quiten el puesto. Siempre se habla de ellas en tono despectivo, como si fueran dos gatas celosas con las uñas afiladas dispuestas a afear el rostro de las rivales. No es un tópico, es real. Pero no es culpa nuestra. No puede serlo si la realidad es que quienes mandan consideran que cuando tus primeras patas de gallo asomen, habrá llegado el momento de retirarse o de esperar a que cumplas los 50 para interpretar a la abuela del nuevo objeto sexual.

Los guionistas mentan su edad y su físico: "¡tendrá unos 60 años!", "solía cascármela con ella"”, “¿no la despidieron porque no tenía tetas?

En 'Better things' dedican un capítulo a explicar el proceso por el que se escoge a la actriz principal de una serie. Los guionistas piensan en ella, alaban sus cualidades interpretativas y su talento para la comedia. Hay quien menta su edad y el estado de su físico: “¡sí tendrá unos 60 años!”, “solía cascármela con ella”, “¿no la despidieron de aquella serie porque no tenía tetas?”. Quienes hacen estos comentarios son quienes deben tomar la última decisión, quienes le darán o no el puesto de trabajo. Aun así, pelean por ella. Creen que atraerá a un público menos teenager y que con un personaje de sus características podrán incluir tramas más adultas. Todas estas conversaciones se suceden a espaldas de Sam Fox, que cree que el papel que interpretará en el piloto es el de amiga de la protagonista.

placeholder Imagen de 'Better Things' con Pamela Adlon
Imagen de 'Better Things' con Pamela Adlon

A pesar de que los creadores inciden en su interés por contar con ella como imagen de su nueva obra, la cadena contacta con ellos para notificarles que Rachel McAdams está interesada en el proyecto. Cuelgan el teléfono y chocan las manos. Está buena y es mucho más joven. Y es Rachel McAdams. A tope con ella. Las cualidades de Samantha se diluyen ante la apetitosa imagen de la actriz rubia. Si quieren filosofar sobre la vida que le busquen un coprotagonista masculino y madurito, alguien tipo Bill Murray. En el no pesan las bolsas de los ojos ni la piel del interior de los muslos. Llaman para avisar a Sam de que el piloto se ha cancelado. No pasa nada, tenía planes con sus hijas. Ojos que no ven, corazón que no siente.

Tenemos que dejar de ser competencia

Quienes hemos trabajado en el mundo audiovisual hemos atendido infinidad de veces a situaciones similares. Me apena observar como infinidad de compañeras sienten que la juventud durará para siempre y que el ostracismo al que se han visto relegadas otras colegas no les sucederá a ellas. Creen que por hacerse amigas del productor o director de turno, estos las mantendrán siempre bajo su ala protector. Nada más lejos de la realidad. Las más maduras, que ya saben cómo va la vaina, sufren viendo cómo el número de propuestas se reducen y cómo las películas que se estrenan apenas incluyen papeles en los que por edad podrían encajar. Con este panorama, no rivalizar entre nosotras es una utopía.

El día que haya mujeres liderando producciones, el tamaño de nuestras tetas y nuestra edad dejarán de ser un problema

¿Cómo podemos librarnos de esta absurda competición? Quiero decir, ¿de qué sirve que trabajemos la sororidad y que nos recordemos que no debemos pelear entre nosotras si nos obligan a ello? Tras años de meditación he llegado a una conclusión: hay que trabajar para romper el techo de cristal que nos impide acceder a los puestos de responsabilidad. El día que haya mujeres liderando producciones, dirigiendo, escribiendo y escogiendo proyectos, el tamaño de nuestras tetas, el color de nuestro pelo y nuestra edad dejarán de ser un problema a la hora de acceder a un trabajo en el que prime la imagen.

Afortunadamente, HBO es de las pocas cadenas que escuchan y atienden las demandas del público femenino cansado de verse en la pantallas adornando las secuencias, así que 'Better things' tendrá segunda temporada. A Sam Fox todavía le quedan unos cuantos papeles de esposa con los que mantener a su familia y con los que hacernos reír. Por no llorar.

Si la memoria no me falla, hay una escena en 'Mad Men' en la que Pete Campbell y Roger Sterling examinan a un grupo de mujeres y mascullan algo así como “No sé qué pasa con ellas que cuando cumplen los 30 dejan de brillar”. El paso del tiempo es la espada de Damocles cuya sombra se cierne sin descanso sobre el género femenino. 'Better things', la serie de la siempre brillante HBO -me pregunto qué sería de las amantes de las series sin las apuestas de esta cadena -, utiliza la risa como terapia contra las arrugas de la piel, las mismas que nos dejan sin trabajo y oportunidades más allá de los 35, siendo generosos.

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