¿Te has quedado sin vacaciones? 5 rutas seriéfilas para viajar sin moverte del sofá

Si tu trabajo, o la falta del mismo te han dejado sin un merecido descanso no sufras. Si tu pareja, o su ausencia, te han obligado a cambiar el paraíso por las fiestas del pueblo, no temas. Si eres de los que deja las vacaciones para otoño, y entonces te cobrarás tu venganza, tampoco. Septiembre llegará y con él los compañeros, amigos y conocidos que se mueren de ganas por contarte cómo les han ido sus esperados viajes a lugares que no puedes permitirte, por lo menos no de momento. Eso si consigues sobrevivir a las actualizaciones en las redes sociales y el siempre molesto “aquí, sufriendo”.

Pero no todo está perdido. Porque si la cartera y la agenda no ayudan a la hora de llegar más allá del chino de abajo, las series de televisión son una buena forma de procurarnos excursiones culturales en algunos de los destinos más deseados por los viajeros. Obviamente, verlo en la pequeña pantalla no es lo mismo que cruzar por ti mismo el puente de Brooklyn, pero a través de las producciones serializadas podemos escuchar el sonido de Nueva Orleans, conocer los restaurantes más cotizados de Italia o Nueva York, recorrer a vista de pájaro los manglares de Florida o viajar por algunos de los lugares históricos más importantes de Gran Bretaña.

Opinión

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Aloña Fernández Larrechi

Soy muy consciente de que la propuesta no equivale a viajar, pero el componente turístico cultural de las series de televisión es innegable. Lo saben bien en muchos lugares de España desde que ‘Juego de Tronos’ comenzó a rodar en suelo patrio. Se podría decir que es la contraria, y sin movernos del sofá, mientras disfrutamos de una buena trama y muchos personajes interesantes, recorreremos palacios y castillos, trasnocharemos en los locales de moda y visitaremos decenas de calles emblemáticas. Si después de la experiencia uno quiere echarle cuento, y compartir "sus vacaciones", ya es cosa suya.

Así que abróchense los cinturones, y prepárense para unos viajes en los que no hacen falta maletas. Por imaginación, que no se diga, a estas alturas de adicción seriéfila.

Nueva York, escenario principal

Actualmente, casi una treintena de series de televisión utilizan la Gran Manzana como escenario de sus producciones. Una rutina constante a lo largo de los últimos años, animada por los incentivos que la ciudad promueve para la industria audiovisual. Las posibilidades televisivas son por ello inabarcables, pero algunas producciones son imprescindibles para conocer mejor la ciudad.

Si Lena Dunham y ‘Girls’ pusieron de moda Brooklyn, Manhattan es el lugar en el que la historia de la ciudad se da la mano con la actualidad. La malograda ‘Forever’ tiraba de archivo histórico para dar forma a las tramas del protagonista, mientras que cómicos como Louis C.K o Aziz Ansari eligieron el Greenwich Village para construir sus historias. Tampoco tuvo demasiada fortuna ‘Smash’ que se sirve de Broadway para alojar los anhelos de sus protagonistas.

‘Mad Men’, ‘Friends’, ‘Rockefeller Plaza’ y ‘Seinfeld’ también captaron la esencia de la ciudad recorriendo lugares míticos, o contribuyendo a elevarlos a la categoría de “visita imprescindible”. Si lo que te van son experiencias menos “mainstream” entonces prueba con ‘Buscarse la vida en América’ o ‘High Maintenance’. Y si quieres convertirte en un lobo de Wall Street, ‘Billions’ y ‘Succession’ son tus billetes a este destino tantas veces inmortalizado por el cine y la televisión.

El aroma del sur

La omnipresencia de la ciudad de los rascacielos en la pantalla ha llevado a muchos a pensar que Nueva York es la esencia de Estados Unidos. Pero la televisión ha puesto especial empeño en desmitificar este bulo, a través de producciones ambientadas en lugares alejados de las luces de neón y los atascos. Como también son muchos los estados que han seguido las pautas marcadas por la televisiva ciudad a la hora de incentivar los rodajes.

Algunos ya oímos hablar de Florida en los años 80, gracias a ‘Las Chicas de Oro’ y ‘Corrupción en Miami’, pero el estado del sol brillante y las naranjas ha ganado interés en los últimos años gracias a tres producciones muy diferentes. ‘Bloodline’ presenta la vida de la familia Rayburn, que tienen un hotel en los idílicos Cayos de Florida. Kilómetros de playas y carreteras sobre el mar salpicados por la truculenta historia de un grupo de personas obligadas a permanecer unidas.

En Miami el relevo de los elegantes detectives lo ha cogido Dwayne Johnson con la deportiva ‘Ballers’, mientras que las manicuristas de ‘Claws’ ofrecen una versión urbana en los suburbios de Tampa. Que en realidad se rueda en la cercana Nueva Orleans, destino deseado por los amantes de la buena comida y la buena música. El lugar que tan certeramente inmortalizó David Simon con ‘Treme’. Aunque nos quedemos con las ganas de probar los platos de la chef Desautel.

Si lo nuestro son las experiencias fuertes, y no tememos lidiar con los ‘red neck’, sus escopetas, sus prejuicios y sus problemas, podemos adentrarnos en lugares como Kentucky o Louisiana gracias a series como ‘Justified’ o ‘True Detective’ (en su primera entrega). La recientemente estrenada ‘Heridas Abiertas’ transcurre en Misuri, pero la realidad es que se ha rodado en Atlanta y California. Así que no cuenta como destino en nuestro viaje catódico.

La lluvia, el puente y “la meca”

La costa del Pacífico ofrece al espectador un interesante recorrido plagado de dramas, familias entrañables, otras no tanto y algunas profesiones de riesgo. Pero salvo contadas excepciones, las producciones ambientadas en el oeste del país, llegan acompañadas de un cielo radiante y unas puestas de sol dignas de una postal, tan propios de la costa californiana. Las rarezas son las producciones ambientadas en el estado de Washington como ‘Fraiser’ y más específicamente ‘Anatomía de Grey’ o 'The Killing’. Esas que nos han ayudado a acuñar el término “llueve como en Seattle”.

‘Looking’ y ‘Girlboss’, las dramedias de HBO y Netflix respectivamente, han sido dos de las últimas producciones que han utilizado San Francisco como escenario. Especialmente interesante resulta la primera, que se preocupa por enmarcar las vivencias de Patrick y sus amigos sacando provecho de esta ciudad-península en la que sus tranvías, sus empinadas cuestas y el Golden Gate forman parte del imaginario colectivo. Estampas que muchos vieron por primera vez en la cabecera de la comedia familiar ‘Padres Forzosos’.

De camino a Los Ángeles podemos pasarnos por Monterrey, uno de los lugares más atractivos que se han estrenado en los últimos años en la pequeña pantalla. Fueron las señoras de ‘Big Little Lies’ las que nos permitieron recorrer carreteras sobre puentes de anuncio y casoplones de suplemento dominical. Un entorno turístico que fue descubierto en el siglo XVII por el navegante español Sebastián Vizcaíno.

En la “ciudad de los sueños” las posibilidades son infinitas y nuestra memoria televisiva lo sabe bien. Desde las playas de Santa Mónica, con sus vigilantes de la playas, hasta las mansiones de Bel-Air, con sus caprichosos dueños, la pequeña pantalla también ha explotado las calles y los locales más conocidos de la ciudad. Y para muestra ‘El Séquito’, que durante ocho temporadas acompañó a Vincent Chase y sus amigos en su misión de triunfar en el cine. Y en la noche.

Los policías desequilibrados de ‘Arma letal’, el escritor frustrado de ‘Californication’, el actor (a veces ) desilusionado de ‘Episodes’ o las atípicas familias que retratan ‘Transparent’, ‘Modern Family’ o ‘Togetherness’ son otras aproximaciones recientes a una ciudad en la que el letrero de Hollywood, el observatorio Griffith o su interminable vista panorámica.

Gran Bretaña, sofisticada y tradicional

Para aquellos que no sientan especial interés por la “aventura americana” en cualquiera de sus formatos, la ficción internacional tiene reservado un recorrido cosmopolita e histórico, monárquico y callejero, en el que son habituales los cielos cubiertos. Porque Gran Bretaña es un escenario habitualmente gris, pero repleto de historias diversas que explotan su pasado y su presente para ser una de las industrias televisivas más importantes. Aunque el interés por la tierra que vio nacer a su Majestad no está reservado únicamente a las producciones nacionales.

Londres fue la ciudad elegida para acoger la última entrega de ‘24’, y en la sexta temporada de ‘Parks and Recreation’ Leslie y sus amigos visitan el Palacio de Buckingham o el London Eye. En la televisión británica series como ‘Dates’, ‘Luther’ o ‘Aplee Tree Yard’ se mueven por algunos de los barrios más populares a orillas del Támesis. Aunque es Netflix, con ‘The Crown’, la que se atreve a adentrarse tras las paredes de la corte, e incluso dedica un magnífico episodio (T01E04) a uno de los momentos más importantes de la ciudad.

Lejos de la metrópoli, concretamente en Birmingham, ‘Peaky Blinders’ es una interesante, y violenta, aproximación a la Inglaterra más industrial, en la que las factorías y el ladrillo visto forman parte del paisaje habitual. Escenarios históricos al alcance de la mano gracias a uno de los muchos museos al aire libre del país. Aunque si queremos un viaje en el tiempo de verdad, ‘Outlander’ nos llevará por los castillos más míticos de Escocia, desde aquel que utilizaron los Caballeros de la Mesa Cuadrada, Doune Castle, hasta el palacio que vio nacer a María de Estuardo, Linlithgow.

Italia, desde fuera y desde dentro

La última propuesta turístico seriéfila es para aquellos que no pueden pasar un año sin acercarse al Mediterráneo. Aunque en este caso se trate de su vertiente italiana, gracias a varias series que han llegado a nuestro país recientemente. Y como su predecesora británica, esta propuesta no es exclusiva de las producciones nacionales, aunque afortunadamente también las hay.

Aziz Ansari ofreció su visión foránea del encanto de los pueblos italianos, con sus adoquines, sus casas de colores y su rica gastronomía en el comienzo de la segunda temporada de ‘Master of none’. La experiencia vital que también se reía de lo propiamente turístico y mostraba los encantos de lo rural a lomos de una Vespa. Un retrato muy diferente al que ‘Trust’ ha compuesto con el secuestro de John Paul Getty III, en el que una Roma mágica da paso a los peligros de las localidades más recónditas del país.

Si además de conocer un poco más la cultura italiana queremos terminar nuestra ruta chapurreando el idioma de Eros Ramazzotti y Raffaella Carrá, las plataformas nos ofrecen varias producciones con un elemento común de fondo, la mafia. Así, en HBO podemos encontrar ‘La mafia solo mata en verano’, un recorrido histórico que comienza en el Palermo de los años 70 y narra la historia de Arturo, un joven que nace el mismo día que un capo mafioso. Más violenta y menos turística resulta ‘Suburra’, ambientada en un pueblo costero cercano a Roma, pero más preocupada por la corrupción política que por las imperecederas villas romanas.